A galope vamos:

Con cada noche, en mi vivo sueño, viene tu sombra misteriosa a entregarse desnuda por completo, y en mi ansia loca te poseo como el mar besa las rocas. Noches algunas de furia y de tormenta, otras de calma dulce y suave viento, pero siempre mi alma se desprende y te besa toda: en mi boca tus pezones juguetean o los dedos de tus pies son mi alimento, bebo también de entre tus piernas el elíxir de la vida y en el peñasco de tus pechos me suicido para alcanzar tus labios entreabiertos, tus ojos se tornan planetarios y gemimos juntos un orgasmo, que no hay más noche ya entre mis noches como aquéllas en que a mi sueño viene desnuda tu sombra y se me entrega.
A galope vamos, amorosos, infinitos, tras las estrellas. Yo jinete, tú mi yegua, y a la inversa, me cabalgas y me besas, me desangras el asta con tu boca de bandera.


SHG