7.- Sigue tu camino

“En mi sombra esta la esperanza de un futuro mejor, en mi carne esta la fuerza para hacerlo posible, y en mis hijos esta el precio que he de pagar por hacerlo.”
– Soldado Behienita

Bebi por fin había llegado a las puertas del pilar de plata, con miedo en su ojos, decidió aventurarse más haya de las sombras, su madre Shiva aguardaba en la entrada a la gran Juzga, tenia la mirada perdida en su hijo, conteniendo cada lagrima, Bebi avanzo y entro a la Juzga, se coloco en centro y miro a los jueces.

- Doberato Reng: Joven príncipe, en vista de los acontecimientos que se han presentado en los últimos dos años, junto con el lamentable deceso del Rey Zarco, yo el Dorebato Reng haciendo uso de nuestra ley he tomado la decisión de ponerte aprueba para hacer uso de Lys – fødder y sellar el inminente regreso del Ragnarok.

La cara del príncipe mostraba un asombro poco disimulado, que poco a poco fue transformadose en miedo a lo que pasaría después, entonces entre las sombras alguien hablo, era Shiva quien con ojos rojos de tanto llorar, pidió clemencia para su hijo.

- Shiva: Por favor, vengo como madre a pedir que tengan misericordia, el es demasiado joven, demasía inexperto, si lo obligan a ir será como enviarlo al suicidio.

- Diosio Agus: yo el Diosio Agus en ausencia del Rey Zarco, y como única autoridad para real para elegir los asuntos del príncipe, he autorizado que la prueba sea llevada a cabo a más tardar hoy a media tarde, y de no pasar la prueba el príncipe será expulsado de Behien y sus alrededores, declarándolo así Atomaya, hasta que cumpla cuarenta años de edad.

Bebi no podía creer lo que estaba escuchando, nadie le había dicho nada acerca de una prueba, y lo peor es que su única familia, su madre, estaba en juego de ser arrebatado de sus brazos hasta los cuarenta años, en ese momento pensó en todo lo que tenia que perder, y lo poco que iba a ganar, empuño su mano y dijo.

-Bebi: por qué nadie me dijo nada, ¡esto es injusto!, si no logro pasar la prueba, ¡seré tratado peor que el asesino de mi padre!, ¡¡acaso están consientes de quien soy de que significo para este pueblo!!..., acaso no hay otra forma de hacer esto…

Bebi bajaba la mirada, con angustia y desesperación, estaba confundido y temeroso, entonces Shiva se acerco puso su mano en su hombro y con una mirada, Bebi entendió la esperanza que su madre había depositado en el, entendió que tenía mucho que perder y solo una cosa que ganar, pero eso era mil veces más valioso que todo y valía la pena intentar.

- Shiva: tu padre tuvo que elegir el camino a seguir, ahora te toca a ti, pero… la decisión final es tuya, y yo estaré a tu lado, no importa lo que pase.

Entre un mar de nostalgia y valor, Bebi tomo la mano de su madre, la beso y regreso la mirada al Diosio y al Dorebato, decidido a no perder lo único valioso que le quedaba en la vida, mientras que devastada por ocultar un último gran secreto, Shiva regresaba la mirada, una mirada llena de lagrimas de arrepentimiento.