Hacía demasiado frío, así que me quede un rato más en la cama. Cuando me levanté ya era tarde y salí corriendo de mi casa. Comprendí que por mucho que me apurara igual llegaría tarde, así que simplemente me tomé mi tiempo y me fui con calma.
Por primera vez hacía mucho tiempo que miraba a mi alrededor. Una señora que pasó corriendo a mi lado se cayó dejando volar por los aires un sinfin de bolsas que llevaba. Iba a ayudarla pero me demoré tanto en decidirme que se paró sola por que nadie más la ayudó. Después de sentir algo de remordimiento seguí caminando, un anciano pedía dinero, como una no sabe si lo usarán para comer o para alcoholizarse, no le di nada. A los dos dias salió en las noticias que un anciano indigente habia muerto de frío en la misma esquina de aquél viejo. Seguí mi camino, una señora estaba golpeando a su hijo y lo gritoneaba en plena calle, todos la miraban pero nadie decía nada... yo tampoco... así camine sin más, presenciando robos, empujones, atropellos y una larga lista de cosas más. Llegue a mi oficina pensando en que la próxima vez debería hacer algo, la próxima vez quizás haga algo... la próxima vez quizás... quizás...