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EL RETORNO DE PIRUA PACARI MANCO





Caminaba por calles y avenidas del Cusco con mi mente ocupada, quería olvidarme por unos momentos de la traumática crisis mundial y de sus gobernantes desmañados. Yo no sé si me crucé con una amiga, o tal vez con alguien conocido, por estar atrapado en mis propios pensamientos. Cansado, me senté en una banca de cemento que apareció sin que yo me diese cuenta.
Había retornado después de varios años, el Cusco estaba diferente, o tal vez yo era otro hombre con apreciaciones contradictorias. El cielo se encapotó presagiando tremenda lluvia, aquélla desconocida por los limeños en su sacrosanto suelo. Me puse de pie y volví al hotel. Allí renacieron mis fantasías, creí retroceder en el tiempo, de súbito aparecieron delante de mí imágenes ilusorias. De niño no le daba importancia, ahora con muchos años acumulados trato de escribirlas. No sé si son fantasías a las que doy vida escribiendo. O tal vez transcribo hechos del pasado, que me dicta una máquina del tiempo, que yo no entiendo y confundo.
Sacsayhuamán se exhibió, al principio las imágenes eran un poco borrosas, pero se fueron aclarando y pude ver a un joven de veinte años, facciones indígenas, de estatura mediana y muy gordo, me di cuenta que él quería pernoctar en la fortaleza de Sacsayhuamán, para apreciar desde aquel lugar el sol naciente. La penumbra acompasadamente fue invadiendo el entorno, él porfiaba y seguía mirando ese conjunto pétreo. Un vientecillo apareció de súbito, apoyó su espalda en una inmensa mole pétrea, puso la mente en blanco, despreocupándose del tiempo, que para él, no tenía ninguna importancia. Recordaba que esas moles pétreas algunas pesaban más de trescientas toneladas y tenían seis metros de altura. Imaginó por efímeros segundos, la asombrosa labor de ingeniería desplegada por los antiguos peruanos. Como el sueño tardaba, hizo desfilar ante sus ojos esas moles pétreas, cortadas casi a láminas y puestas unas sobre otras, colocadas en ángulos rectos para crear poliedros. En esos instantes pensó en una civilización extraterrestre conocedora de los secretos de la levitación, y la antigravedad, porque no alcanzaba a comprender cómo fueron construidas. Corisoncco que permanecía en estado de quietud, de súbito vio aparecer delante de él una luz que cegaba sus ojos. Quiso ponerse de pie y no pudo, con enorme esfuerzo clavó la mirada a la luz fulgurante, luego preguntó muy nervioso:
―¿Quién está ahí?
No hubo respuesta, la luz cada instante se hacía más fuerte y él sin más remedio trataba de esquivarla. Esta vez grito con más fuerzas y sus gritos parecían perderse en esos enormes bloques pétreos. La luminiscencia se fue encogiendo delante del atónito Corisoncco, y poco a poco se transformó en un pequeño sol y de él salieron algunas palabras:
_No debes asustarte, soy Pirúa y he retornado para ayudarte a romper las cadenas que esclavizan a tus hermanos y desvirtuar todas las falsas historias tejidas a cerca del Imperio Incaico, desde la llegada de los conquistadores a nuestros días. Mentira tras mentira se ha escrito ocultando la grandeza de los incas, portadores de nuestros genes. Esos hombres que engañan son los nuevos inquisidores, racistas históricos, que niegan la inteligencia de tus hermanos indígenas y afirman que los conquistadores europeos eran más evolucionados.
_No entiendo nada, por piedad déjeme descansar, yo sólo quiero ver nacer el sol.
_¿Nada te dice mi nombre?
_No conozco el significado de Pirua, además, creo soñar despierto y me confundo.
_Entiendo... Soy un ser altamente evolucionado y vengo del planeta Júpiter, en el pasado tus hermanos le llamaban Pirua en aymará. Vine para instruir y civilizar a tus hermanos.
_Yo soy un simple mortal y no creo tener ese honor de poder hablar con un espíritu superior. Aquí hay seres de gran capacidad vibratoria y ellos son los encogidos.
_No niegues tu don, entre los vivientes en la tierra, tú eres el escogido.
_Si eres Pirua, el primogénito de los incas, te pido perdón e imploro que me enseñes el camino, dado a que pretendo ayudar a mis hermanos peruanos explotados y narrarle al mundo su verdadero origen, sus grandiosas obras arquitectónicas, sus sabias leyes y tantas cosas más distorsionadas a propósito para poder dar fe que los conquistadores trajeron cultura y conocimiento en vez de destrucción y desgracia.
_He retornado y te llenarte de conocimiento, tal vez es la única forma de enfrentarse al enemigo. El hombre embrutecido es fácil de explotar y de aniquilar. Si despierta del embrutecimiento, pone en peligro las historias de los inquisidores y racistas históricos que distorsionaron la verdad.
Corisoncco ya no tuvo miedo, su corazón en ese instante se llenaba de energía, que transformaba las vibraciones en paz y amor.
El pequeño sol desapareció, Corisoncco se puso de pie y buscó desesperadamente el lugar donde se ocultaba, pero no lo halló. Volvió a recostar su espalda en la enorme mole pétrea, pensando que era victima de visiones incoherentes: producto de su soledad y tristeza. De pronto, sintió pasos y abriendo los ojos, pudo notar a un individuo de tez blanca, cabellos rubios y alargados. La túnica blanca que vestía, le cubría hasta los pies y su frente estaba adornada de una borla colorada. Corisoncco no dejaba de mirarlo, quería hablar y no podía. El personaje misterioso se fue acercando y Corisoncco dio un grito de intenso pánico.
_No tengas miedo. Yo soy el Pirua de hace un rato, en mi cuerpo primigenio que es materia. Antes viste mi espíritu que es luz.
_Soy humano y no estoy preparado: energía y materia me confunden.
_Y no debe ser así, pues estabas buscándome en tu interior, sin darte cuenta para ser instruido, yo te enseñaré así como en antaño, enseñé a este pueblo.
Se me llamó Pirua Pacari Manco, estuve alrededor de sesenta años en este mundo y después retorné a mi planeta dejando a mi hijo Manco Cápac. En aquella época, los pueblos del Cusco estaban aglutinados, y los habitantes vivían a su imagen y semejanza de los propios animales, a pesar de que otros seres superiores ya los habían dotado de racionalidad, mediante procesos genéticos y otras veces cruzándose con las bellísimas mujeres de tu orbe. Vine con el fin de enseñarles a que viviesen como hombres en razón y urbanidad. No era posible imaginar que no habitasen en casas, labrasen la tierra, cultivasen las plantas y las mieses. Que no criaran el ganado y que no gozasen de ellos, así mismo, de los frutos de la tierra, si eran hombres racionales, lejos de ser bestias. Fui el primer Inca del Cusco e impulsador de la idea de un solo Dios llamado, El Gran Todo. Corisoncco escuchaba con atención, pero dentro de su interior deseaba preguntarle al divino maestro: el gran Pirua. Él con su sapiencia comprendió sus ansias y dejó su narración momentáneamente__. Pregunta…
Quedó maravillado, debido a que el Pirua le había leído los pensamientos.
_La historia dice que descendemos de Ophir, hijo de Joctan ambos descendientes del Patriarca Noé, unas de las tribus perdidas, trescientos cuarenta años después del diluvio, y la creencia de un solo Dios fue heredada de la familia de Noe.
_Estos lugares yacían deshabitados, así como todos los territorios de este mundo. La vida surgió del mar y mediante el proceso de evolución nació el Homo Sapiens, posteriormente, habitantes de otros mundos modificaron su ADN, y el nuevo ser creado por los extraterrestres fue a su imagen y semejanza. El propósito fue hacerlos trabajar en la extracción de diversos minerales para la elaboración de combustible a emplear en las naves galácticas. Al terminarse los materiales raros, dejaron tu planeta. Con el tiempo nacieron las razas, las castas y supremacías. Las guerras llevaron al nuevo hombre a su destrucción, e hizo retroceder a la humanidad a mayor barbarie. Pero los habitantes de toda la región son originarios de ella. Sobre el monoteísmo, doctrina del conquistador, los principios son distintos, el Dios casi humano y extranjero en estas tierras, es celoso, colérico. Sus seguidores obraban bien y lo adoraban con la esperanza de ganarse el cielo. Ese Dios, cruel, sanguinario y egoísta, no es el de tus hermanos. Puesto que creían, que Dios es todo lo que es, y que ellos eran parte del Todo, así mismo, que los objetos inanimados tenían conciencia, porque tan igual que los seres humanos integraban el Todo. Que el hombre era espiritual por naturaleza y que su destino de la chispa divina, oculta en lo más profundo de su cuerpo físico dirigíase al Reino de La Luz, es por eso que llamaron Illatici a El Todo, que quiere decir: La Luz Eterna.
_Venerable Pirua, hay muchos hermanos que miran con desasosiego nuestra historia, ya que los actuales inquisidores, racistas históricos les metieron en sus cabezas que un puñado de ladrones y asesinos, que apenas llegaban a cien, vencieron al Inca Atahualpa.
_En un principio se pensó que los hombres barbudos eran los antiguos piruas que retornaban del cosmos a entregar sus enseñanzas, y esa fue la razón de su entusiástico recibimiento. Mientras los unos pensaban en algo místico, los otros en asesinar y asirse del preciado metal amarillo. Por esa razón, Pizarro ordenó antes del encuentro con Atahualpa que fueran envenenados los oficiales del Inca. Y así fue que los desavisados, bebieron vino con arsénico. Al no contar con sus oficiales, Atahualpa quedó huérfano, ya que no podía reorganizar a sus ejércitos. Los usurpadores actuaron frente al Inca con alevosía. En otras circunstancias, no hubiese quedado un conquistador con vida.
_¿Eres Dios, por qué has muerto y resucitado?
_Simplemente; no he muerto, lo que sucede es que nosotros estamos en otra dimensión en que los días cósmicos son superiores al planeta tierra: lo que hace que nosotros vivamos muchos años. Y, por último puedo decir que al ser muy evolucionados, tenemos vibraciones veinte veces más que los humanos: 350,000 ciclos de movimiento atómico por segundo, pudiendo alcanzar en la tierra hasta 500,000.
Es potestad mía regresar, sólo para ayudarte a escribir la historia, comenzando de muchos años atrás, prescindiendo de los dogmas impuestos. Pero mientras tanto, tú llénate de sabiduría y cuando tengas el material en tus manos, volveré.
Pronto tu sol saldrá de nuevo y es justo que lo aprecies en toda su magnitud, yo debo partir. Antes te diré que en tu interior se encuentra la sabiduría. Navega por tu inmensidad virgen, y pronto encontrarás todas las respuestas.
El gran Pirua desapareció y Corisoncco quedó solo en esas fenomenales moles pétreas. Cumplió con su propósito, vio salir el sol y pensó que la visita del Pirua, fue un sueño, pero que le había transformado en otro hombre, ahora quería saber la verdad sobre sus orígenes y volver a escribir la historia del Imperio de los Incas. De tanto en tanto se amanecía para ver al Pirua, pero éste no aparecía y se limitaba a repetir como muchos:
_Y cada noche que este mundo concede, escrutamos atentos las nubes esperando veros volver sobre los carros de fuego a recoger lo que habéis sembrado.

FIN

Texto agregado el 17-04-2011, y leído por 296 visitantes. (1 voto)


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