No sabía que Menotti era comunista,
No sabía que Hendrix era Fascista,
regala una canción a Cristóbal para que comprenda.
No hay dolor sin víctimas, ni altar sin sacrificio.
Mi escándalo viene detrás del suyo.
Olvido mis letras tras la borrachera infernal de la soledad,
espera, me dijiste, comprendí , y di la vuelta.
No hay juicio para los triunfadores,
y el delirio está reservado a mi locura.
Te entrego esta carta como testimonio.
Mis hachas se afilaron hace bastante, esperando el día del juicio,para cortar las cabezas insanas del resquicio insuficiente.
Mis poemas se torcieron tras las risas, y los vidrios se quebraron por mi llanto y por mi rabia, sin razón, por supuesto, pero eso a quien le importa.
Te mezclaste con los sucios, los podridos, un enjambre de corruptos, caterva de impíos mal nacidos, que escondieron mis conceptos sin salir de su laberinto, seguros de su victoria. Pero yo encontré la puerta, encontré el escape, y me refugié sin mirar atrás en las ruedas voladoras del profeta Ezequiel.
Jai Guru Deva
Ya es hora de volver
|