Quedamos para charlar en un café del centro. Llega con cinco minutos de retraso que justifica diciendo que no encontraba en donde estacionarse. Miente pues la vi bajándose de un taxi y arreglando sus mechones turquesas frente al vidrio de la cafetería. Se sienta, cruza las piernas y por los agujeritos de sus medias de red se vislumbra una piel bien cuidada. A pesar del giro que ha dado en su carrera y del look radical que ostenta, Oksana sigue poniendo énfasis en su imagen. Pide un mocaccino frappé y antes de que yo formule la pregunta, empieza a hablar como si estuviera tendida en un diván o como si tuviera bien aprendido el discurso que va a largar:
“Yo había perdido todo, no era dueña de mi tiempo ni podía decidir nada sobre mi carrera, pero no estaba dispuesta a perder la libertad creativa. Así que decidí aprender a tocar la metralleta. No fue fácil, al principio mis amigos se pusieron en contra, pero al matar al primer violento -con puntería prodigiosa- comenzaron a tomarme más en serio, ayudándome, incluso, a conseguir un arsenal con el que pudiera experimentar más posibilidades.
Se requiere de una dedicación absoluta para lograr sacar algo distinto al lugar común del traka-traka natural a estos instrumentos. Haciendo uso de mi estudio portátil, armé algunas secuencias y texturicé algunas capas de sonido; pero soy una romántica y no me gusta basar todo el trabajo en procesos digitales, así que, luego de componer una suite para tres metralletas y un revólver digitalizados, di el siguiente paso”
Oksana sorbe su mocaccino y prosigue:
“Cuando me entré de que Burroughs había presentado, hace muchos años, una exposición de objetos baleados (puertas, muebles, retratos) me sentí fatal: llevaba casi medio año trabajando en lo mismo; en una obra original, según yo, que de original no tenía nada. Me frustré como nunca. Se me ocurrió, entonces, trabajar sobre cuerpos humanos: trazarlos a cañonazos y barnizarlos, luego, con algún esmalte resistente, y colgarlos así en las paredes de los museos. A estas alturas, ya había olvidado que mi contrato era por dos discos más y que lo que estaba haciendo no tenía nada qué ver con la música, mi primer y único amor. Así conocí el poder subyugante de las armas sobre la psique humana, al punto de enamorarme del comandante de policía que me aleccionara en el uso de éstas -en mi país, para que uno pueda portar un arma, hay que pasar por un curso impartido por la misma policía que certifica tanto el permiso como el debido manejo-, pero tuve la delicadeza de mantenerlo en el campo platónico, lejos de una libido dispuesta a escurrir sólo por saberse centro de una mirilla perfectamente calibrada.”
Le pido que me hable más sobre Burroughs y su influencia en este nuevo proyecto. Me dice que sí pero que antes debe ir al baño. Vuelve con más energía y aunque repite la pregunta que le formulé se sale por la tangente.
“Durante un par de noches estuve dando vueltas en mi auto por las calles de la ciudad, pensando en cosas como matar, en agujeros negros de los cuales brotaban chorros magenta, en ojos desorbitados y en lenguas repentinamente blancas que ya nunca ayudarían a formular palabras...”
- "Cantos", tu nuevo disco, ha producido un revuelo pocas veces visto en la industria discográfica de este país. ¿Cómo se te ocurrió la idea para hacerlo?
- Jugando. Una noche, luego de haber estado muy clavada en otras cosas, lo vi clarito: un disco de confesiones de delincuentes y criminales consignados, a lo que comúnmente se le llama "cantos". Tengo un amigo en un puesto policiaco importante y él me ayudó a estar presente con mi estudio portátil en los interrogatorios. Luego, bueno, viene el trabajo de diseño sonoro.
- Eso es otro asunto, pues usas el sonido de armas disparándose para las secuencias rítmicas, lo cual es verdaderamente interesante.
- Sí.
- ¿Cómo llegaste a esa concepción musical?
- Acá podría decirte algo así como que en tiempos como los que vivimos, uno como artista debe trabajar con lo contingente, con lo que hay allá afuera en las calles, con lo que toda la gente convive a diario. Así podría decirte, pues, que "Cantos" expresa un momento histórico concreto, en el que el sonido de las ráfagas es casi uno más en el ambiente cotidiano de las ciudades, como el de los motores de automóviles, el trasiego humano o el de las aves al amanecer. Pero, la verdad, es que yo quiero estar lejos de todo aquello que refiera a algo ya conocido y no me interesa el papel de "conciencia social". Lo mío es la experimentación sonora.
- Pero cómo fue que de un disco como "Soy Tuya", tu anterior material -un disco conformado por baladas y ritmos pop- llegas ahora con este disco totalmente fuera del maisntream y tan arriesgado. ¿Cómo llegas a esto?
- Así, experimentado. Te confieso algo: estoy avergonzadísima de "Soy Tuya"; si pudiera, haría que aquello nunca se hubiera grabado.
- ¡Pero es un disco que ha vendido más de un millón de copias!
- A ese millón y poco más de personas que compraron ese disco les digo: Shame on you!
Lo dice con desparpajo, como si estuviera mirando a una cámara de televisión. Cada frase es perfectamente calibrada. El cambio de instrumento y sus posibilidades de uso sin duda han dado un giro en la que fuese un ícono pop seguido por adolescentes e incluso por niños.
¿No estás cometiendo una clase de suicidio con esta postura?
- Sí, quiero matar a esa que fui y ya no soy.
En definitiva, Oksana ha matado a esa otra y sin dudarlo mataría a esos otros que fielmente la siguieron. Su nueva apuesta musical dará de que hablar y también hará callar a sus detractores a fuerza de talento o de balas.
"Una apología al mundo criminal",Rogglin Storm
"¿A quién quiere impresionar esta mujer?", Rock & Pop
"Lamentable desperdicio de recursos en la grabación de este adefesio. Se le deberían levantar cargos judiciales", Music Weekly
"Poesía de y para nuestros tiempos", Boomba!
"Un disco que ya tiene su propio lugar en la historia, para bien o para mal", Revista M
"¿?", Clave de Sol
Track List:
1. Miedito
2. Nadie sale vivo de aquí
3. Defensor de oficio
4. Una bala es una bala
5. Jodido
6. El comandante (canción de amor)
7. A nadie le importa lo que nos pueda pasar
8. Hoy por ti, mañana también
9. Sicario de mi corazón
10. Hijos de nadie
11. Un mundo raro
12. Money, money, money
13. Dios nunca muere (Bonus Track en Japón y Australia)
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djtormenta dijo:
pinche vieja ridikula
chapo_de_chapos dijo:
a sta kbrona la van ayar echa kk por ndar de pallaza xD
lauritalinda dijo:
lo ke hacen las drogas!!! ya saben chikos!!! si no la controlan no la consuman!!! jajaja ;)
suppermann dijo:
si no les gusta no la oigan! a mí me parece que al menos presenta algo nuevo y no cai en lo comercial de siempre. la de "comandante" está buena para bailar!
elbusloko dijo:
sta chido el diskoooooo!!!
supuma dijo:
El arte se expande y aunque le quieren poner cercas, este avanza a velocidad de ráfaga.
hunter dijo:
si me enkntro a sta kulera le rompo el pnche oziko por baboza. sto es como aplaudir a los delinkuentez... boikot al disco!!
ululilo23 dijo:
me uno al boikot!!!
javieraguilar dijo:
me da risa ver a la gente reaccionar según lo que la televisión les dice y no me queda duda de que este es un país de reaccionarios mochos y pendejos. este es un discazo por donde se le vea.
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