Y voy a lo profundo
me busco en el magma que late
burbujea y se retuerce
bajo la roca de dureza azul
y no me encuentro.
Miro el cielo orgulloso y celeste
a través del cono de un volcán
Emano como tibia lava, lenta, pausada
me escurro por laderas conocidas
Entre bosques de aromas eróticos
Que arden de deseo.
Y desde lo profundo asomo vivo
Tenso, ansioso, húmedo
Agradezco al sol que me renueva
Que me llama y me alimenta
Mientras ilumina
Las arenas blancas de tu lecho
Texto agregado el 29-03-2011, y leído por 163
visitantes. (3 votos)