LUZ DE CRISTO
Tú eres luz, mi Señor, Tú eres la vida,
Más allá de la cruz y de la muerte…
Tu palabra de amor, hoy me convida
A convertirme y a mudar mi suerte…
Permíteme, mi Dios, que ahora te pida
La beatitud de idolatrarte y verte,
De celebrar tu gracia y tu venida,
Y en el duro bregar, siempre quererte…
Que, a pesar de mi injuria y mi pecado,
Quiero, Jesús, que seas siempre mi amigo,
¡Oh Hijo, del Eterno bien amado!...
Suplico tu perdón, no tu castigo,
Porque siempre seguirte he procurado,
Y ser, entre los hombres, tu testigo.
EMILIOSALAMANCA
24 marzo 2011
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