Dejarse vivir sin más razones que abrir los ojos
y respirar
la luz brumosa de la mañana
el frío de las fogatas apagadas
pájaros saltando de rama en rama
y tu mano caliente entre las sábanas...
Un café compartido en la cama;
dos abrazos antes de levantar las ganas,
una gruesa chaqueta para envolver un alma
que no quiere dejar la curva de mi espalda...
Besos presurosos
Carreras de pasillos
bolsos voladores
te amo en un grito...
Y después,
este silencio,
(los árboles estan creciendo)
las hierba mojada platinada de cielo
y mi mirada perdida en un sortilegio:
la vida serena es reflejo de adentro.
...como esta mañana
...como esta mañana.
Texto agregado el 18-03-2011, y leído por 116
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