Entraste por esa puerta que está ahora detrás mío, me tomaste por la espalda, me diste un beso de películas, me dí vuelta y sonreí, de fondo sonaba una canción de The Red Jumpsuit Aparatus, vos tambien sonreías, era perfecto. Entonces te desvaneciste, y me dí cuenta que todo aquello que me hacía tan feliz, no era más que otra divagación de mi mente enferma.
Me duele todo esto, me duele tanto. Me dolés, Matias, y ni siquiera sé si esa palabra existe, no me importa tampoco. Me duele saber que hay en tu dedo un anillo con el nombre de otra, y que es esa otra quien tiene algo mío (mío, mío, mío). Me duele saberte tan lejos, errante, desnuda yo de tu amor bajo la interperie de un no saber.
Sinceramente, estoy triste (muy), y no entiendo una mierda.
Que jodidamente enferma que soy.
(Te extraño). |