El pasante humilde

Si me detengo porque mi camino este obstruido, entonces cargare cada piedra para seguir, si me resbalo porque este húmedo, entonces lo secare y si no hay mas camino, entonces hare camino al pasar, y luego me detendré al final para observar el camino ya despejado por el cual pase y contemplar como tú puedes pasar.

Sufrimiento esperanzado

Ya no soporto la soledad a la que tu adiós me ha desterrado, en mi delirio he quedado esperanzado, tal cual el desierto espera eternamente al roció, pero he conseguido tener compañía; el llanto y el recuerdo, aunque prefiero el llanto porque el recuerdo se ha convertido en el verdugo mío.

Sufrimiento optimista

Ondean mis suspiros en el viento y errante voy como un naufrago vencido, mientras la noche cae para acobijarme con su manto anochecido, pero no quiero ver el cielo, porque en cada estrella que veo, allí están tus ojos en sus reflejos, mi fortaleza una vez se desplomo para darle paso a tu cariño y me quede desprotegido, ahora he de verme aquí como un mendigo sin abrigo, pero el tiempo será bueno y me dará un mejor pan con un excelente vino.

La simplicidad de las cosas

La simplicidad de las cosas hemos dejado de mirarla, ya no quiero aferrarme a una mentira vana, una hipocresía que nos carcome noche y día, ¿Por qué lo simple se nos ha hecho tan complejo? Nos dominan las cosas que creemos necesarias. ¿Acaso no son necesarios los besos y las miradas? ¿El ruido de la brisa, el canto del ave en las mañanas? ¿El gesto de las personas por ser sinceras y humanas? El materialismo y la lujuria las hemos convertido en función primaria, pero no hemos sido diligentes con sus consecuencias y viene siendo hora de adaptarlas. ¿Cuando dejamos de ver lo simple y magnifico de la esencia humana? La simplicidad de las cosas quiero volver a mirarla.