Sobre la pasión Sexual
Queridos amantes de la verdad, hoy vengo con la boca llena de no más que humildad, alegría y sinceridad.
Se dice que solo aquellos cuya perfección aflora en la piel, aquellos cuyos aspecto físico es su más grande talento, aquellos que viven en un concurso de belleza permanente, aquellos a los que pertenecen las comedias románticas y las escenas de cama, se dice que solo ellos son dueños del color rojo, ¡sí!, ese rojo intenso que se confunde con las llamas del alma y que se da solamente de dos en dos, pues hoy les digo queridos amantes de la verdad que la pasión no es clasista, sexista y mucho menos racista, es más, yo, hoy les digo que el color rojo les pertenece a los desposeídos, si, por que aquellos, los infames felices, nunca sabrán lo que es una gota de agua en medio del desierto, ellos están sentados en nubes de miel, en donde el sabor dulce es tan común como el aire que respiramos, nunca sabrán el valor de un beso apasionado en medio de un cuarto húmedo sin electricidad y con no más que un colchón, el color rojo salva la vida y el alma de muchos de los que cargan la pirámide, si no fuera por él no existiría pirámide.
De esta manera y por este pensamiento, los desdichados serán dichosos y los dichosos serán desdichados, esto se podrían bien llamar un socialismo de la pasión, entonces si el peso en tus hombros te llega a doblegar recuerda que el peso de sus besos apasionados te habrán de levantar, pero solo aquellos que se caerán serán los que podrán resucitar.
Así les digo hoy queridos amantes de la verdad que ustedes son los dueños de una de las pocas cosas que de verdad importa, que es imposible de robar, imposible de comprar, y ellos, los infames felices podrán besar apasionadamente sus cuentas bancarias, pero el dinero jamás podrá responder: ¡TE DESEO!
Así hablo Daniel Arias
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