La noche se me arroja pretendiendo atraparme
Envuelto en el cinismo de mi propio abismo no encuentro escapatoria
La oscuridad me aborda penetrando las paredes de mi alma
Enciendo el último cigarrillo
Una lumbre fugaz me acompaña
Derrumbo una pila de libros a patadas
Acojo a la soledad en mi cama
Me invade la imagen escondida tras mi espalda
Las siluetas se insinúan de forma excitante
Despertando al que duerme entre mis partes
Me invita a sobarlo
Sedo a sus encantos
Luego de un buen rato de contener las ganas
Estalla húmedo en mis manos
Me abandonan las ansias de seguir acariciándolo
Cierro los ojos
El desgano me gana.
Texto agregado el 05-03-2011, y leído por 64
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Lectores Opinan
06-03-2011
mmm
la soledad
atrapa
y el desgano es veneno
me encanto astartita
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