Alud de tu risa iluminando la penumbra, esquivando los deseos de realidad. Tu mirada fuera de foco y tu voz fuera de tono, alcanzaron el cielo, perfecto como se ve, y volvieron por más de lo que algunos infiernos pueden dar.
Texto agregado el 04-03-2011, y leído por 214 visitantes. (3 votos)