Enero 201. Gracias por sus envíos.
Hay palabras, tan sencillas como un pan con mantequilla, que te regalan la agradable luz del día.
Palabras que nacen de la misma raíz y que más adelante, cuando ya son un fruto en el paladar y nos ofrecen con el sabor del Universo, sé bien del origen que compartimos todos los seres.
El mundo se vuelve interesante, tierno y el sol resplandece con tranquilidad, como en el tiempo de infancia, dejando correr sus brillos de magia densa en la fresca agua de la vida.
Es emocionante para mi, el descubrir en mi espacio, rincón existencial de mis pensamientos concretados en palabras escritas, los comentarios, saludos, criticas y felicitaciones de personas a quienes jamás, de no ser por la narrativa, habría tenido el gusto de tratar.
Cuando estoy con el teclado entre manos y con la vista en el monitor, me dejo llevar por ustedes y palpita la supervivencia de sentimiento como una galaxia de calor, me fusiono a sus palabras y suelto a los emociones como caballos libres… para que galopen su libertad en lo que queda del crepúsculo y, ya cansados, laman estrellas de azúcar a la luz de la noche.
Y me digo, sosteniendo la mirada en sus palabras, la realidad del recuerdo es tan sólo la belleza de la narrativa.
Gracias por sus envíos, inspiraciones, trabajos, reflejos de un alma que embellecen a quien los envía.
Desde BC, mi rincón existencial, con gratitud. Andrea Guadalupe.
|