La Efigie De Nuestro Amor:
Mi rostro ruboroso,
Mi corazón presuroso;
Y mis manos explorando el paisaje emocional,
De a poco me principié a excitar,
Es prodigioso como el roce de tu piel
Me hace tentar, temblar, suspirar…
Lentamente te incorporas a mi cuerpo para juntos jugar,
Cubriéndome de besos y caricias sin parar,
Procurando saciar las ansias infinitas de amar,
Sin dejar espacio sin explorar.
Es tan inmenso el placer que me siento morir,
Tan maravilloso es poseerte dentro,
Poderte sentir,
Columpiarme en ti, suspirar y gemir;
La inminente pasión que me hace revivir.
El fuego de esta efusión nos hace vibrar, sudar, acabar.
Efigie impactante de cuanto nos podemos amar…

Pamela Sandoval