Se miraban, con esa luz inexplicable que empaña al resto del mundo, se miraban... sin más anda que eso, sin intenciones ni motivos... tal vez tenía que pasar, tal vez no, sólo sé que sucedió sin buscarlo, como suceden los milagros... como nacen los amores.
No hubo tiempos, no fue necesario...quizás porque durante toda la vida se esperan esos momentos, entonces para que prolongar plazos innecesarios cuando un instante maravilloso está al alcance de la mano. Fue magia creo yo, porque dos miradas no se fijan sin acercarse, sin crear un vínculo.... y así sucedió, se acercaron, con la inexorable certeza de qu todo tienen una razón de ser por más ilógica que parezca.
En fin, como les iba diciendo, se acercaron... primero con la mirada, luego con el alma (aunque tengo dudas acerca de ese orden), le siguieron los labios... Ah!! Si!!... se me pasó por alto mencionar los labios anteriormente... esa suave manera de hablar sin palabras... un beso, pero no cualquier beso, un beso de esos sin prisas, sin búsquedas, yo diría “natural”, de los que nacen ingenuos y ya no quieren dejar de existir.
Creo que ya mencioné que el tiempo en ésta historia no tuvo ningún papel, todos los personajes estaban tan enfocados en la magia que no se percataron que existía el tiempo, o tal vez el motivo es el director, y como todo director decide la cronología de su historia, él decidió que no la tuviera, y creo firmemente que fue mejor así...más real, más viva... más mágico... ¿Donde quedé??? ... ya sé, en el beso, pero no fue sólo el beso, si no la piel que llama a otra piel sin explicación alguna, aún sin tocarse... podría resumir toda la historia en ese abrazo... ojalá lo hubieran visto, fue... fue más que un abrazo, fue un roce de almas que levitaban al unísono escondidas entre dos mortales y sus vidas, o al menos así pareció... aunque sigo pensando que debieron ver ese abrazo...
Después... después sólo siguieron instintos, y ese sexto sentido que dice que hagas, que vayas, que digas, que beses... aunque yo prefiero seguirlo llamando magia... pero como no es mi historia y a mi toro yo no le gusta que hable por ella, entonces seguiré simplemente narrando...
La historia aún no ha terminado....supongo que aquí es donde digo “Continuará”...