Gmfs se esparció durante el anochecer y poco antes de la medianoche decidió llover sobre Mö. Allí se mezcló con sus amigos, corrieron por un cauce alegremente hasta que una poza los recibió.

Uyau que hacía sombra sobre la laguneta los vio y como es un ser de aire los meció rítmicamente hasta el segundo atardecer del día y primero de la noche. Miudl en agradecimiento explotó con una luz fulgente y Uyau floreció de alegría.

Gmfs se incorporó al grupo de susurros y repartió una golosina, todos vibraban alegremente, Mdl, hizo un gesto con la mano y apareció una gota de sol muy concentrada y muy luminosa que quedo flotando alrededor. El otro se agazapó y una melodía suave surgió como luz en el ambiente, todo era fiesta y comunión. Cerraron los ojos, Gmfs, Pldt y Miudl y así jugaron estratos hasta casi el último amanecer. Cuando abrieron los ojos, en ese pequeño instante, creyeron ver unas vigüelas en el horizonte, la gota de luz aún brillaba tenue y Miudl de un salto se la tragó. Dejaron el sitio con la música tenue aún viva y flotando se separaron cada uno hacia su constelación.

Apareció entonces, con las primeras gotas de rocío, la enorme serpiente verde y brillante que perezosamente envolvió a Mö y comenzó a tragárselo y luego se comió su rabo y finalmente desapareció. Quedó sonando la música suave, cada vez más parecida a un recuerdo. Un poco antes de desaparecer, comencé a despertar y en mi sueño creí ver unas vigüelas volteando una esquina, y vi hacia un espejo que por casualidad las reflejaba y logré atrapar a una con mi mirada.

Entonces, me quedé con la mirada perdida, mirando sin mirar al espejo, evitando respirar. Al presentirla junto al espejo cerré los ojos, simulando un sueño y alcé mis manos suavemente, como recibiendo la hostia. La Vigüela que es muy curiosa, se posó en las manos y entonces la atrapé. Era linda, y vibraba levemente.

Sonreí, porque ese día cumplía años Rosa, y se la iba regalar…