-Hola, ¿Cómo estás?
-Bien y ¿tú?
-Aquí, estaba esperando a que te conectaras
-¿En serio y eso?
-Es que he estado pensando mucho en ti desde la última vez que hablamos
-Pero eso fue apenas unas cuantas horas
-Unas cuantas horas que para mi valen en días
-Qué lindo eres
-No, yo creo que tú eres la linda, yo solo soy un pobre tipo que cree estar enamorado de la mujer más hermosa que jamás haya conocido en el mundo virtual
-Entonces déjame decirte que yo también siento algo por ti
-¿Y qué es eso que tú sientes?
-¿Por qué mejor no te lo digo en persona?
-¿Hablas de encontrarnos?
-Sip
-Eso sería increíble….

9-Sep-10
Primer encuentro
j.E.P.a


Sólo faltaban 48 horas para encontrarme con ella y no sabía que camisa ponerme para tan importante ocasión, y si no le gustan las camisas, demonios que hago, abro mi ropero y solo veo ropa vieja como de señor casado, muevo mis prendas de un lado a otro para buscar algo que la pudiera cautivar pero solo me encuentro con polvo y una que otra ropa ochentera que ya ni me acordaba que tenia. Salí rápidamente a la tienda departamental para comprarme una camisa nueva que me hiciera ver más joven, un nuevo perfume y zapatos nuevos, estoy seguro que ella lo valía.

Era tanta mi ansiedad por cruzar una palabra con ella que pensaba que ese día nunca iba a pasar, trate de hacer cualquier cosa para matar el tiempo, desde ver videos cómicos por internet, hasta escribir cuentos de amor que me permitieran fantasear por algunas horas para llegar relajado a nuestra primera cita, pero nada de eso me sirvió.

2:00 pm abajo del reloj de la estación rio de los remedios, sería el punto de encuentro, ella se describía como chaparrita, cabello chino, delgada, ojos cafés, vestiría unos jeans azules y una blusa del mismo color algo escotada, en su hombro colgaría una bolsa negra donde sobresaldría una rosa roja.

Llegue a la estación una hora antes, pues no quería hacerla esperar, y aunque faltaban 60 minutos para que ella llegara me sentía más nervioso que cuando invite a salir a una chica por primera vez, sabía que cualquier mujer que pasaba por ese lugar y me miraba podía haber sido ella, eso solo hacía que mi corazón se acelerara mas y mas. De pronto empecé a sudar, desde el ultimo vagón vi acercarse a una mujer de blusa azul, una bolsa en su hombro y una hermosa rosa roja que salía de esta, pero que se opacaba con la belleza de semejante ser humano que me iba a encontrar, tregüé saliva y prepare lo que iba a decir.

Sólo faltaban 47 horas para encontrarme con él y no sabía ni que hacerme para tan importante ocasión, me veo en el espejo y me maquillo de mil formas para encontrar una combinación que sea capaz de cautivarlo, pero solo me encuentro con cosas muy sencillas y anticuadas. Salí rápidamente al salón de belleza buscando que la artista de lo estético me transformara en una mujer totalmente nueva, estoy segura que él lo valía.

2:00 pm abajo del reloj de la estación rio de los remedios, sería el punto de encuentro, él se describía como alto, cabello corto, moreno, robusto, ojos negros, vestiría un pantalón de vestir al igual que una camisa y una corbata roja, su mano sostendría una rosa blanca.

Llegue a la estación justamente a la hora acordada, pues no quería hacerlo esperar, apenas salía del vagón lo reconocí, lo podría reconocer en cualquier parte, caminaba hacia él mientras pensaba en que le iba a decir.

-Hola, ¿Qué tal el viaje?
-Bien, gracias caballero, que apuesto se ve hoy
-Gracias señorita, pero pienso que usted me opaca
-jajá, siempre serás así de coqueto ¿amor?
-Mientras tú y yo sigamos sigamos vivos y casados tratare de cortejarte todos los días
-Eso me parece muy bueno porque sabes que yo hare los mismo por ti hasta que la muerte nos separe.
-¿Vas a responder mi pregunta?
-¿Quieres saber lo que siento por ti?
-Claro
-Amor