Cuando las ciudades amanecen, parecen enseñarnos sus secretos, como diciendo !Mira so yo la puta de la casa de citas.
O yo soy el chico que dejo preñada a esa chica.
Un drogadicto parece pensar esa es María, la chica que todos los días me da mi dosis a cambio de dinero.
Y se dice para si a su vez aquella no se quien es pero siempre que pasa me llama la atención.
Oscurece de nuevo y la ciudad parece encerrar nuevos secretos que poco a poco hay que ir descrubiendo como un viaje hacia el interior de ti mismo, del ADN de tu ciudad.
Texto agregado el 26-12-2010, y leído por 120
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Lectores Opinan
27-12-2010
aunke esa es una realidad, yo prefiero mirar el amanecer, es siempre hermoso y tambien es real brancaneves