Ayer la vida caduca del antagonismo
Caía sobre rieles desesperados de anhelos.

Le suplique a la luna darme el consuelo mundano
Del beso desesperado por pasión y deseo,
Mas la 9° sinfonía de los kamikazes de mi
Alma alzaba vuelo a las hordas de suaves
Caricias y romance pagano.

Le pedí a Cupido otra flecha en el
Corazón para olvidar a la “Elena”
De mi traición; si a esa dulce
Princesa de ojos castaños y sonrisa
Siniestra, cuyas palabras rodaban mi ser,
En un tierno abrazo de espinas,
Púas y dolor…

Ah… que delicioso dolor bañado con néctar
De amor ciego y masoquismo de conquistadora
Pero… ¿por qué mis labios desean besar
La piel de la princesa de la mentira?...
Que meritos gana mi alma si ella solo quiere
Jugar con mi corazón y arrancarme la piel pedazo a pedazo?...

Y le pregunto al tiempo:
qué futuro me espera,
Al lado de la reinas de los condenados?
Y este contesta:
Una pedrada sublime a tu honor y6 orgullo,
Ya que ella quiere sodomizar tu mente y
Controlar tu cuerpo.

Hoy; despierto separado del
Augurio que los vientos alisios me trajeron.
Miro a la hojarasca y
Le escupo en la cara a la miseria de las personas
Maldiciendo a Cupido por sus errores y fracasos.

Pero… ¿Qué es esto?; le pregunto a la ironía y ella
Contesta: “es el rayo de luz bajo la esperanza
Ciega de tu fe, es la doncella escarlata que tanto
Has esperado mas sin embargo el destino tiene doble cara
Y debes elegir sabiamente”.

A mi derecha veo a la guardiana de todo lo bello
Con su báculo de sabiduría extendiéndome un beso.
Y a mi izquierda esta la princesa de la inocencia
Coqueteando y ofreciéndome amor en silencio.

Mañana deseo despertar de este increíble sueño,
Al lado de mi amada…
De la que me eligió sin remordimiento,
La que conoce mi pasado y me ínsita
A estar orgulloso de ello….

¡SI!... porque mi futuro esta sellado
De la mano del 1° beso,
De la mujer que cree que soy verdadero…

Cupido si alguna vez te insulte
Perdona mi ignorancia y dale mis disculpas
A cronos por ser ciego.
Y viento… hermano del alma;
Bendice mi vida y protege a mi princesa escarlata
Del advenimiento porque justo es que ella sea feliz
Mientras yo aun pueda vivir…