El Ministro de Salud en Chile ha dicho “ No le demos tanta bulla a los niños muertos, hablemos mejor de los que se han salvado”. A la misma hora los padres de Alondra de 5 meses, contaban como estuvieron durante la última semana tratando de cuidar a su niña, como hasta las 4 de la mañana de ayer se mantuvieron despiertos, para que se quedara sentada, para sacarle las secreciones. Ella se calmó seguramente, y se fueron a dormir un poco. A las 7 de la mañana, cuando fueron a despertarla, ella ya no estaba ahí. Alondra murió a pesar del esfuerzo de los médicos del hospital al que la llevaron.

El padre de la niña, Max, dice que no le quedó otra cosa que abrazar a los médicos y decirles “Gracias”, ya nada se podía hacer. Ya son cuatro niños los que han muerto, el asesino, el virus sincicial, que ha mutado, que ahora ataca a los menores de un año, que antes no lo hacía y ha engañado a los médicos. Chile es hoy un país con buenos estándares de mortalidad infantil, en el nivel de muchos países europeos y de EEUU, pero aún así, la cara de Alondra esta mañana me hace pensar en muchas cosas.

Me hace pensar en como se nos va la vida de las manos, así de rápido, así de inmanejable. Lo jodido que está el sistema de salud, lo poco que sabemos para cuidar a nuestros niños, lo triste que puede ser estar de Ministro en periodo de elecciones (en Chile, de aquí a 2 años tendremos Municipales, Parlamentarias y Presidenciales), porque tendrán que callar cosas que quisieran decir, y decir lo que no quieren, (aunque nadie los obliga, su ansia de poder a lo mejor).

A parte de “dejar” morir a nuestros niños, hemos visto con estupor que en el mayor caso de abuso contra menores, hasta un Obispo ha sido llmado a declarar. El “hasta”, es porque aunque está claro que no son de los trigos más limpios, “moralmente”, podríamos esperar más de ellos, de la mayoría. Cayó un Alcalde estrella del Gobierno, dicen por ahí que hay otros empresarios, más políticos. No sería raro, vemos Lolita, la película y alguien dirá “es lo mismo”. Pero en Chile ahora hay una ley que protege a los menores. ¿Funcionará?.

Un conocido crítico de espectáculos justificó ante cámaras el tener relaciones “consentidas” con menores, pero ahora eso en este país es delito, porque no es tan fácil de probar el consentimiento, porque muchas veces el consentimiento viene metido en un sobre con billetes, y eso es otra cosa. Este “icono” de la TV chilena, se fue quedando sin trabajo en cascada, después de sus dichos... bien y mal. El mismo canal donde fue entrevistado, encarado hasta que “soltó” esta frase, ahora lo contrata como panelista.

En algunas calles de Chile, mujeres con niños pequeños piden limosna. Se ha comprobado que muchos son “niños arrendados”.

Alguien dijo “el futuro de Chile NO está en sus niños, está en los adultos que educamos a esos niños”.

Les dejamos a ellos el futuro, a algunos apenas los dejamos vivir meses, a otros los asilamos bajo un puente, los prostituímos, los obligamos a atrabajar.

Tenemos que cuidarlos. No sé cómo, me desvelo por eso, porque tengo un hijo y tres ahijados, todos pequeños, y ahora que estoy convencido de que yo soy el artifice del futuro, y no tengo la comodidad de dejarselo a ellos, me asusto, me confundo. Y tú?