MI DULCE HADA DEL BOSQUE
Me gusta verte morder los labios disfrutando cuando te acaricio, te siento húmeda y totalmente rendida a mí. Siento que puedo hacer contigo todo realidad y a la vez siento que debería dedicarme solo a fantasías contigo mi bella hada… Tu dulce rostro me inspira a perderme en tus ojos, en tus gemidos, en tus caricias. Me desconecto y trato de llevarte conmigo hasta donde nada más existe, nada más que tú y yo.
La noche es larga me digo… y dejo que me seduzcas, tus manos parecen indicar un camino sin retorno al cual me vuelco con todo y zapatos, no busco regresar, te confieso que me quedaría a vivir contigo dentro de este árbol de tonos azules, verdes y luz siendo sólo una brisa que acaricia tu mejilla y mueve tu cabello, pero nunca me permites quedarme más de lo necesario.
Tus labios entre lilas y rosas, que combinan muy bien con tu aliento a licor... Ese aliento que me envuelve y me embriaga. Sueles ser tan dulce al inicio y luego tan imparable. Mis labios se desviven por rozar los tuyos, me transformo en lo que buscas, todas las noches que nos vemos para ti soy lo que no puedo ser por mi mismo… por ti soy viento, espuma, una hoja, un duende, una hormiga y tu héroe. Por ti solo existo, solo cuando respiras junto a mí se que hay aire, sólo cuando me besas siento los latidos dentro mío. Tu mi dulce hada, mi amiga, mi amante y complemento… Tú...
La noche siempre se hace breve, y aunque puedes detener el tiempo con solo pensarlo prefieres que sea así, mientras susurras que sólo así se aprecia lo que tenemos, momentos breves que no volverán y que debemos vivir intensamente.
Tu suave piel me impide despegar mi ser del tuyo, es un vicio del que quiero vivir prendado hasta envejecer a tu lado, quiero verte todos los días de mi vida, quiero sentirte toda mi vida. Quiero compartir tus momentos buenos y malos, ser parte de tu mundo, sé que me condeno a existir siendo sólo una hoja de este gran árbol tu cuerpo, pero quiero compartir tus alegrías y tristezas, quiero hacerte reír y verte llorar, busco tus ojos y todo lo que hay dentro de ti, tus sueños, deseos, ilusiones. Comparte conmigo tu existencia y a cambio te entrego la mía, tú mi dulce hada. Yo un adorno más en tu mundo.
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