En tiempos de los caballeros
Las aventuras, su armadura, su caballo, el castillo donde encontraban a su princesa luchando en medio de dragones y gigantes, todas estas cosas pertenecieron al mundo de estos valerosos hombres de Europa, todas ellas son la vida cotidiana de los caballeros en la edad media.
Para la elaboración de este ensayo tome como fuentes primarias: el libro de George Duby llamado el siglo de los caballeros (1995), la vida cotidiana de los caballeros de la mesa redonda de Michael Pastoreaux (1990) y como fuentes secundarias: tome un libro infantil llamado ¿dónde está wally? Viaja por la historia los caballeros de Martin Hanford (2000) y Arturo el legendario rey de camelot de Mary Phelan (2004). Los primeros tres textos son fuentes que contienen casi que la misma información, pero a pesar de esto encontré diferencias acerca de lo que fueron los caballeros en aquella época.
Empiezo hablando entonces de la fecha ya que este fue uno de los primeros problemas que encontré puesto que no es la misma de todas las fuentes.
George Duby dice que los caballeros aparecieron entre 1160 y 1220 durante el reinado del rey Felipe augusto en el norte de Francia, a diferencia de Pastoreaux que plantea una importante diferenciación acerca de los caballeros antes de ser una institución.
La caballería es una institución que se introdujo en el sistema feudal hacia el año mil .
No podemos definir una fecha clara para el origen de los caballeros según estos dos autores, pero es que hay que tener en cuenta que según Pastoreaux la caballería estaba abierta a todo hombre que hubiera sido bautizado, y cita a los cantares de gesta como una fuente para encontrar allí campesinos, leñadores, comerciantes, juglares y cocineros que fueron armados como caballeros por parte de su señor como recompensa a los servicios ofrecidos durante tantos años. Con esto quiero hacer referencia a que este autor menciona después que a partir del siglo XII los caballeros nacen como una institución y solían reclutarse entre los hijos de caballeros y así formar una clase hereditaria, la cual ocasiono que los plebeyos casi que desaparecieran ya que durante esta época hay un dominio de una clase y el caballo, el equipo militar, la ceremonia de iniciación de un caballero y su investidura eran muy caras, y por esta razón la vida del caballero se convierte en un mundo lleno de lujuria y en esta época eso solo se podía conceder a causa de la posesión de tierras. Por lo tanto había que vivir con las riquezas que un señor concediera.
En conclusión si es posible que antes la caballería no hubiera estado formada como institución, pero no estoy de acuerdo con lo que Pastoreaux menciona de los plebeyos antes del siglo XII ya que así hayan sido armados como caballeros no los considero así puesto que la vida de un caballero es ostentosa, y por eso mismo los caballeros eran señores feudales que combatían a las ordenes de reyes y emperadores, no era cualquier persona de la sociedad la que podía acceder a este cargo según lo que pienso, aunque cabe agregar que más adelante demostrare que el dinero para un caballero no era ta esencial como se piensa.
El lugar donde habitaba un caballero no fue siempre el mismo ya que este fue reformado al pasar de los años.
El castillo era el hogar para los caballeros, la familia, los ciervos, y los soldados. Era también un campamento militar, y un centro financiero. Desde allí los administradores reunían los tributos a los vasallos y juzgaban los delitos.
Los castillos según Georges Duby eran edificaciones de tierra y madera, por lo cual era muy fácil prenderles fuego. Durante la guerra servían de guarida para los caballeros y la trampa allí consistía en el mecanismo que cada caballero instalaba en su castillo, dispuesto para atrapar a su adversario cuando este iba a buscarlo. Estos mecanismos consistían en un espacio pantanoso, un espacio rocoso, o mecanismos que al ser presionados arrojaban púas, u otras cosas como se hace referencia en el caballero del león.
“la puerta era muy alta y ancha pero tenía una entrada tan estrecha que dos hombres y dos caballo no podían entrar a la vez ni cruzarse sin grandes dificultades y esfuerzos porque estaba hecha como la trampa que espera a la rata que viene de hacer su fechoría. Encima habían puesto una espada que estaba a punto de bajar, golpear y atrapar pues se pone en movimiento y desciende enseguida que algo roza la llave aunque lo haga suavemente. También había debajo de la entrada dos soportes que sostenían en el aire una puerta deslizante de hierro, afilada y cortante. Si algo pasaba por estos ingenios la puerta bajaba y todos los que quedaban debajo quedaban atrapados y trinchados”
George Duby en el siglo de los caballeros (1995), menciona que solo hasta el siglo XII los castillos de madera son reemplazados por los de piedra, y esto mismo se dice de estas estructuras en el libro: ¿dónde está Wally? Viaja por la historia los caballeros de Martin Hanford (2000) a diferencia de Pastoreaux que en su libro la vida cotidiana de los caballeros de la mesa redonda (1990) menciona que a finales del siglo X se alzan muros, y la piedra reemplaza la madera inicialmente para el torreón seguido de las torres de defensa y murallas.

Pastoreaux no nos explica que era el torreón pero Georges Duby lo describe perfectamente de la siguiente manera:
El torreón se alzaba en la cima de ese montículo. Era una especie de torre cuadrada y estrecha: su superficie interior apenas superaba, por la regla general, los veinte metros cuadrados..
Es importante esta descripción que se hace del torreón ya que pienso que es la parte más importante del castillo después de las murallas y los mecanismos que hay dentro del.
El hogar en el castillo pasado el patio había una construcción que estaba destinada a la preparación de comidas, en la planta baja también había un criadero de aves. En el nivel superior se encontraba la chimenea donde se asaban carnes y se cocían a fuego lento los caldos. Después se ingresaba a una habitación por una escalera donde se amontonaba la harina. Los barriles de cerveza y el vino, luego se entraba directamente a la sala que tenía dos cuartos pequeños uno para el pan y el otro para las bebidas. Esta sala era empleada para comer, celebrar fiestas y dormir. Como dato curioso quiero agregar que después de cenar, las mesas se retiraban y se colocaban en el suelo “jergones” de paja.
Finalmente es bueno que sepan que el castillo también era considerado como un taller de hilado en el cual se confeccionaba las ropas que se utilizaban en la casa.
Ahora quisiera entra en materia y contar a ustedes lo maravilloso de una época que considero es la más bella de toda la edad media, y hablar acerca de los caballeros como tal.
Un caballero no era cualquiera que ensillara un caballo y se vistiera como un hombre de metal. Los caballeros empezaban su formación como si fuera un colegio desde muy niños.
Los padres de un niño lo enviaban a donde un tío materno que no tuviera ni esposa ni hijos y este se encargaba de hacer las veces de profesor ya que se encargaba de la formación del niño como un caballero.
En algunos casos no eran siempre familiares los encargados de esta educación. Había hombres que confiaban la educación de su hijo o el cuidado del mismo a su señor feudal. El feudalismo era fuertemente apoyado por la amistad que hubiera entre el señor y sus vasallos.
Esa amistad surgía en una ceremonia de la cual hablare más adelante y debía reanimarse constantemente, por esta razón los caballeros estaban obligados a ir periódicamente al castillo de su señor al cual habían jurado siempre fidelidad, para pasar allí unos días en compañía de su rey, y por supuesto debían asistir cada vez que el rey los citaba a la corte.
El entrenamiento de los caballeros empezaba por la casa de zorros o ciervos desde muy niños. En los descansos se les ponía a ejercitarse con el tiro con arco.
Cuando ya eran adultos y se les dotaba de lanza y espada , aprendían a manejar los nervios y a apuntar bien a medida que se adentraban a los misterios del bosque ya que este lugar se consideraba como un sitio lleno de animales monstruosos y criaturas temibles para el hombre.
Durante la juventud los jóvenes que aspiraban hacer caballeros y dominaban todos los secretos del bosque servían a sus caballeros como escuderos. Escudero viene de la palabra escudo, y estos hombres eran los que se encargaban de transportar el escudo de los caballeros, y cuando en un combate eran derribados del caballo el escudero se encargaba de llevarle un nuevo caballo.
Finalmente cuando se llega a la adultez por fin inicia la aventura de caballeros, la cual tenía inicio en una fecha de pentecostés con una ceremonia denominada “entrega de armas”. La ceremonia tenía lugar en la nueva casa a la que va a vivir el niño desde que es pequeño. El señor de la casa es el encargado de entregar las armas: destrero, las espuelas, la espada, la capa.
En 1180, en ciertas regiones, ya lo habían conseguido. Se veía cada vez con mayor frecuencia al aspirante a caballero prepararse la víspera del gran dia mediante un baño ritual que le purificaba simbólicamente, de sus faltas… 4
Duby menciona un relato que ocurrió el 24 de mayo de 1181 y fue escrito por un sacerdote
El único gesto mencionado y que aparece presentado como gesto esencial por el que el se administra, es el >. En la ceremonia de la armadura se golpeaba violentamente con la palma derecha el cuello del caballero al que armaban .


Para hablar acerca de los caballos confronte la información que me presentaba Duby y Pastoreaux, debido a que el segundo autor nos muestra las distinciones que hacían algunos autores sin citar cuales fueron sobre las diferentes maneras de ver a los caballos según la función que cada cual les daba
• Palafrén: es el caballo de la aristocracia montado por damas y señores en las ceremonias
• El corcel: es el caballero de batalla, el caballero no cabalga con él hasta que inicia la batalla, este es conducido por el escudero.
• Rucio: fuerte caballo de tiro, empleado en las tareas de campo y el tiro
• Acémila: es el animal de carga que lleva los equipos durante los desplazamientos.
Son importantes estas distinciones que se hacen, para entender porque durante esa época un caballo era objeto de envidia. Por esta razón los hombres más ricos disputaban los mejores caballos. Los más valiosos eran los caballos de color blanco y negro, después venían los que eran de un color cualquiera pero que tenían manchas blancas en su cuerpo, a mi parecer animales así demasiado especiales.
Había por supuesto talleres para los caballos tal y como lo vemos hoy día con los talleres de mecánica puesto que estos eran los carros de la época.
Los caballeros disponían de al menos 4 o 6 caballos para una batalla: un caballo para el camino, un caballo que es el que transporta sus armas, y tres o cuatro caballos para el combate, el cual era la única oportunidad que tenía un caballo para hacerse famoso, ya que estos por sus hazañas se volvían famosos y eran llamados por un nombre propio en la corte real.
A diferencia de la novela cortes, el cantar de gesta lo presenta como el animal más fiel compañero del héroe y lo personaliza con un nombre: Tencedor es el caballo de Carlomagno, Veillantif el de Roldan, Tachebrun el de Ganelon…

Las armas eran otra de las partes que debían conformar un buen caballero. Los escuderos eran los encargados del buen estado de las armas. Cuando estas se encontraban dañadas eran fundidas para que de esta manera el metal se pudiera recuperar.
Las espadas de los caballeros eran diseñadas para que con un corte traspasara la armadura, por esta razón era larga de algo más de 1 metro y pesaba alrededor de 2 a 3 kilos. La espada para el caballero jugaba un papel muy importante y acerca de esto Georges Duby nos dice que el caballero trataba a su espada como a una persona, como a su propia esposa.
Por otro lado encontramos la lanza las cuales eran fabricadas en madera dura con hierro como de jabalina y primero se usaban para desarmar a la tropa antes del ataque con la espada. Después se pensó que era mejor atacar al contrincante directamente porque el golpe era más fuerte.
Como la madera se rompía muy fácil después se fabricaron lanzas más gruesas para que no se rompieran y por su puesto su medida llegando a ser algunas de hasta dos metros y medio.


Ya sabiendo cómo es que era el proceso de un caballero, decimos entonces que partía a su aventura llevando los colores de la casa de la que había salido, en el escudo, y bordados en las armas para participar dos años en los torneos y difundir fama a la casa.
Las armerías: “emblemas de colores, propios de un individuo, una familia o una comunidad, sometidos, e su composición, a normas especiales y representados generalmente sobre su escudo .
Pastoreaux hace referencia en su texto a que las armerías aparecen el siglo XII y sirven para el historiador de la época como un espejo en el que se encuentra la mentalidad de aquel tiempo.
Las armerías se extienden rápidamente por Normandía, Inglaterra meridional, y valle del Rin entre otros. En la época de su origen, solo los jefes militares tenían derecho de portar tales emblemas, pero rápidamente, su uso se generaliza entre los vasallos, ocasionando que para el siglo XIII toda la mediana y pequeña nobleza tenía a su disposición su escudo de armas. Las mujeres en 1156, las ciudades en 1190, los clérigos hacia 1200, los burgueses en 1225, los campesinos en 1234. Podemos hablar entonces del escudo de armas desde el momento en que un personaje emplea los mismos signos constantemente.
Surgieron en un tiempo ciertas normas para las armerías. Una de ellas consistía en que se prohibía colocar metal sobre metal, y color sobre color. Los metales eran el oro (amarillo) y la palta de color (blanco). Era contrario a esta norma entonces colocar el oro junto a la plata. Los dibujos de las armerías, jugaron un papel muy importante, por ejemplo un pescador elegía un pez, alguien que participara en una cruzada llevaría una cruz. Y así sucesivamente con la profesión, un hecho histórico, o un origen geográfico. Por lo tanto yo escogí para mi armería un libro junto a un lapicero para levarla por toda mi vida.





Cambiando un poco del tema de las armerías: los caballeros erraban de país en país buscando hacerse famosos con sus hazañas y ningún rey podía negarles hospedaje.
Pero quiero ahora describir muy bien en qué consistían los torneos en los que participaban los caballeros, ya que estos torneos eran los lugares de esparcimiento para los caballeros así como los juegos de ajedrez.
Durante los veranos los caballeros pasaban luchando por un matrimonio o una disputa entre dos señores.
La guerra significaba en aquel tiempo: devastar la tierra del adversario, destruir la cosecha, capturar el ganado, llevarse los carros con lo que hubiera adentro y sin lugar a dudas quemaban la torre del castillo.

Cuando había épocas de lluvia la guerra se pactaba mediante un trato o una tregua hasta que el clima permitía reanudar la batalla. Solo hasta el siglo XI en el norte de Francia, los príncipes organizaron lo que se conoce cómo los torneos.
Los torneos eran enfrentamientos entre distintos grupos armados frente a expertos que eran por así decirlo los árbitros los cuales al final de la justa concedían premios a los mejores jugadores.
Los torneos del siglo XII no opone a dos individuos si no a dos grupos de hombres, de armas, algunos a caballos, otros a pie, y el buen orden que procede al combate se transforma con rapidez en una tumultuosa confusión donde, como en los campos de batalla se lucha en pequeños grupos empleando símbolos de reconocimiento.
El torneo entre dos individuos se realizaba de dos maneras. Una consistía en una lucha, en la que dos caballeros a caballo, cada uno con una lanza y un escudo luchaban de la siguiente manera: el caballero tomaba el escudo con su brazo izquierdo, y con el derecho la lanza; la mantenía recta y vertical, mientras se acercaba al trote a su adversario. Cuando solo estaba a treinta metros aproximadamente ajustaba su lanza con la mano derecha y la colocaba en posición horizontal de frente a el otro caballero al cual atacaba por la derecha en la mayoría de los caso, ya que habían algunos que cubrían con su escudo esa parte de su cuerpo por lo cual el otro caballero tomaba le decisión de golpear con la lanza al adversario en la cabeza o el pecho.
La otra manera de pelar en un torneo de dos caballeros era por medio de sus espadas, y obviamente ganaba el primero que hiriera en la armadura al otro. En el campo de batalla podían ocurrir muchos accidentes ya que este tenía barrancos en algunos casos.
Por esta razón en el torneo se permitía cualquier clase de golpes, engaños, y artimañas razón por la cual considero que “en la guerra y en el amor todo se vale”.
Si un caballero se encontraba cansado este podía retirarse de la batalla para beber un trago y descansar.
Al final del día cuando uno de los individuos ganaba o en el caso de la batalla por equipos uno de ellos conseguía la victoria, los jugadores que n estaban heridos regresaban completamente extenuados. Se dirigían después a donde los herreros, reparaban el escudo, y algunos debían colocar la cabeza sobre el yunque para poder quitar el yelmo golpeado por los golpes de su cabeza.
Por su parte los prisioneros que se adquirían en los torneos debían pedir monedas a sus familiares para que de esta manera pudieran ser liberados.
Los ganadores de las justas ponían precio a los caballos raptados y se habría en las tiendas una feria de caballos.
Al terminar el torneo la reina entregaba un objeto simbólico al ganador, y los caballeros luego de acabado el torneo esperaban que la gente hablara de ellos porque la fama valía más que todo el dinero. Pero aparte de conseguir fama mediante los torneos estos condenados hombres a la lucha esperaban seducir a una joven o por lo menos volver de los torneos con una promesa de matrimonio.
Durante el siglo XIII la iglesia condena la única diversión de los caballeros y lo esencial de la vida militar: los torneos
A pesar de todo, la iglesia, en el transcurso de los siglos XII y XIII sigue condenando esos fútiles encuentros en los que se juego a luchando; juegos de azar y de dinero en los que a menudo hay algún muerto, y donde se debilitan inútilmente las fuerzas de la caballería cristiana cuya única preocupación debería consistir en defender Tierra Santa…
Tal prohibición nunca debió hacerse ya que como me pude dar cuenta estos valerosos hombres estaban siempre a disposición de su rey, y la única forma de esparcimiento que tenían era luchando en estos torneos, en los cuales la gente se divertía, ya que se puede decir que eran estos los primeros eventos deportivos a los que la gente asistía con sus familiares y amigos, apostaban y pasaban un rato agradable con la lucha de estos hombres de metal.
Para finalizar este texto un caballero debía ser educado como una persona ya que si algo caracterizaba a estos hombres eran los valores que cada uno debía poseer y por supuesto que existía casi que un código para ser un caballero.
En la corte el caballero debía:
• Debía comportarse de forma decorosa.
• Dar buenos consejos al rey.
• Hablar de cosas divertidas o serias, y estar abierto a contar sus aventuras.
• Ser amable.
A su vez también el caballero debía ser un hombre franco, recto y leal. Por ejemplo en el bosque se debía estar seguro que ningún compañero de armas se iba a devolver, ni tampoco huir en medio de una pelea, ya que el primer deber era cumplir con la palabra o si no debía ser expulsado de la compañía de los valientes hombres.
La mesura era otro de los valores que un caballero debía poseer. Por ejemplo se enseñaba a los escuderos:
• Reprimir la cólera, la envidia, el odio y la codicia.
• Debían tener mesura al hablar cuando llegaba su turno, es decir debían ser cuidadosos y casi que como se hace hoy en día levantar la mano para tener la palabra.
• Debían ceder el paso a sus mayores
Por último encontramos el valor que creo yo es el más importante para estos hombres: la cortesía.
Un caballero por ningún motivo debía sentir apego por las riquezas. Los caballeros se esforzaban por hacerse amar tal y como lo podemos ver en obras como Tristán e Iseo o El Caballero del León, en donde sus protagonistas realizaban hazañas para mostrarlas a la reina.
Estos hombres también tenían su corazón dispuesto a dar amor. Por eso quiero finalizar este rico ensayo con lo que debía pasar para que un caballero se casara y las mejoras en las armaduras a través del tiempo.
Para que un caballero lograra independizarse conseguir un puesto como sus antepasados el caballero debía de casarse, ya que cuando este no se casaba era considerado ante su corte como un “junior”.
Los caballeros andantes dispuestos a dar amor se casaban mas fácilmente siendo fieles a un solo patrón que casándose por amor cosa que no era muy difícil para ellos.
Finalmente cuando un caballero realizaba una hazaña considerada de alto valor para el rey, el patrón recompensaba a los más fieles otorgándole a una de sus hijas, para que esta se casara con él y de esta manera conseguir la adjudicación de gran porción del reino.
El siglo XII, el siglo más maravilloso para mi durante la época medieval, gracias a la existencia de estos hombres marca el final de un legado, los hombres de metal son fuertemente reforzados cuando en 1214 la armadura se refuerza forrando todo el pecho de hierro para evitar que la espada o la lanza lo atravesara.
El fin de una era llego, los primeros castillos de madera llegan a su fin para abrir paso a ese mundo aun más maravilloso de castillos de piedra, en donde las torres ya no son cuadradas sino redondas y guardan consigo la historia que cada cual tiene para contar.
El dragón que alguna vez un hombre por amor mato. El gigante que derribaron por loca pasión y el valor que alguna vez, un hombre demostró en este mundo para siempre se quedo…