Las horas pasan deshojadas con su nostálgica marcha.

desaprueban mis días de tu ausencia rotunda…

fatigosa quietud en medio del aturdimiento insistente

que busca el encuentro de tu aliento que oxigena.


Me siento privada de tu expresión azucarada

y los minutos incontinentes se roban mis lágrimas,

cargadas de la ansiedad predecible, por mi estado impaciente.


Es mi atrevimiento un tornado de piel y humedad,

apreciable desde tu lejanía, sacado a pulmón

de tus arroyos acaudalados,

que me sumergen en este frenesí apolillante.


De dónde extraigo los recuerdos memorables.

de la savia convincente de tu suavidad masculina

escurrida en mí figura anhelante.


Secreta es mi agonía desde la distancia efímera

donde sueño el delirio de un presente extasiante.

en tu boca salvaje me siento perdida.

es la sensación muda y confusa que me deja tu sabor


By Alexandra Esi Derechos reservados Nov.2010