5 de noviembre 2010

28
j.E.P.a

Desastre y ¡mas desastre!, reviso mi celular y faltan 30 minutos para que mi examen profesional ¡empiece!, este trafico infernal me va hacer perder meses de estudio, que pasa, ¡que pasa!

Escucho a unos señores a mi lado diciendo que es 28 de octubre, ¿28 de octubre? Dios ¿y eso que?, me pregunto, no se que pase pero ya odio los 28.

-Aah! Todos los 28 son iguales, este tráfico, esta gente cargando figuras más grandes que ellos..
- Si pero ya sabes que así se pone cada mes, ya ni para que quejarse
- Las autoridades deberían hacer algo, esto ya no puede ser.
- Las autoridades, y luego a quien le pides.
-Pues entonces quién….

Dos chavos, yo diría niños, interrumpieron al señor.

-Ahora si banda, venimos de la iglesia de Sn Hipólito de nuestro señor san judas, y les vamos a pedir de lo mas atentamente posible que le caigan con lo que traigan porque Sn judas así lo demanda.

¿Así lo demanda? Esa figura que de dos centímetros ¿lo demanda? Eran unos tipos vestidos con tenis de basquetbolistas, sinceramente no creo que lo practicaran, eran gordos y se les notaba el ombligo fuera de esas playeras rayadas pegadas a su cuerpo, morenos como de 1.50 metros de estatura y si estudiaban, aun no pasaban de la secundaria. Lo que me parecía mas curioso eran sus gorras, ¿Por qué no se compraron unas de su tamaño? Los dos usaban gorras mal puestas que parecía que se les caerían en cualquier momento, con un soplido. Por favor, no iba a ceder frente a la amenaza de dos niños con una figura religiosa en la mano.

-Haber tú que nos vas a dar
-¿Yo?, perdón pero no traigo nada
-Cámara mijo` que Sn judas te va a castigar

Ya no soportaba el tráfico ni el retraso que tenía para tan importante examen, que solo pude decir esto:

-A mi que me importa que me castigue tu muñeco! , porque no te bajas del camión, y quitas a todos tus raros amigos del paso para que yo pueda llegar a hacer algo de provecho y no como tú una simple rata.

¿Por que dije eso? El que me haya tardado tres años en mi tesis no me daba derecho, ¿que sería esperar otro año?
-Mira cabron dame tu pinche celular y así lo dejamos
-no, tú estas mal, no te voy a dar ¡nada!

Metió su mano en una de sus bolsas y me amenazó con una navaja de unos 20 cm de largo totalmente nueva y brillante. Murmuro algo y dejo deslizar su cuchillo sobre mi costado izquierdo de mi estomago, trate de levantarme, trate de hacerme para atrás, trate de sacarla, pero estaba sometido, mientras, su compañero husmeaba en mis bolsillos, abrió mi mochila, dejó caer mis cosas en el piso del camión, no encontró mas que un libro con mi nombre, nada que le importara, inmediatamente sentí como resbalaba el afilado cuchillo fuera de mi, y vi como los dos sujetos bajaban del camión. La sangre brotaba incesante de mi cuerpo, los asientos estaban color carmín y mi ropa ya no era más blanca. Mire mis manos rojas, mire a los señores que me observan con rareza diciéndome cosas y otro hablando por teléfono, no me importaba, no puse atención, solo pensaba en mi tesis, me agache para intentar recuperarla pero mi vista se nublo de repente y no pude abrir mis ojos otra vez.

- Pues entonces quién…
- La respuesta esta en nosotros somos los únicos capaces de hacer algo al respecto, los únicos que debemos decidir si queremos que nuestra juventud se convierta en esto, somos los responsables. No a la prohibición por que fomenta seguimiento, Ahí que exponer a estos individuos y lo que conlleva su estilo de vida, ahí que crear conciencia para que los niños y adolescentes se forjen otro estilo de vida.