Quizás mi voz no escuchas, no se confunde entre la gente. No es tenue ni leve, solo es silencio que provocas. Adentro en tu corazón se encienden, sonidos que albergan amor del alegre. Mirarte es el nuevo lenguaje que de ti emerge.
Texto agregado el 05-11-2010, y leído por 179 visitantes. (2 votos)