Se que soy experta a hacer cuentos sin principio ni final. Supongo que me aterran los finales, especialmente porque no he encontrado ni un final feliz. La vida es así, si no es feliz no es final, y supongo que en la vida los finales nunca son feliz. Y de los principios, puedo concluir que es falta de costumbre, porque a veces duran tan poco. Ojala algún día pueda llegar a contar un cuento y no solo un fragmento de un pensamiento. Supongo que tendrá que ser el cuento de alguien más, o por lo menos no inspirado en mis propias experiencias.
Esto es solo del final.
A veces me pienso cobarde. Siento que la etapa de transición en la cual dije haberme encontrado nunca terminó. No entiendo que me guía, no entiendo que es lo que siento. Talvez no me guía nada, talvez siento todo. Estoy perdida y no se que hacer. Si de los errores aprendemos los humanos, soy toda una aprendiz. Pero no es lo mismo saberlo en teoría que ponerlo en práctica. Y entonces, eso me hace una incontinente, ¿no es así?
Cada quien hace los sacrificios que hace por las personas que quieren porque están dispuestos a dar todo eso sin pedir nada a cambio. Ese amor trillado e imposible, donde uno siempre quiere más que el otro y consecuentemente es uno el que siempre da más. Pero llega un punto en que dar tanto y no recibir nada a cambio cansa. Supongo que eso me pasó con vos. Yo llegue a mi límite. Me siento orgullosa de haber podido saber cuando parar, aunque doliera. Eso significa que he aprendido, y no en vano. Pensaba que pedía mucho hasta que me di cuenta que me conformaba con poco. Las cosas han cambiado, y con ellas yo también. Y ojala suene egoísta porque es algo que nunca he podido ser. Vos en cambio, no sabes ser nada mas que eso.
También he aprendido que odiar no me lleva a nada y que eso no cabe en mi corazón. No podría cargar con mi conciencia sabiendo que cada vez que algo malo pase estaría dispuesta a herir a esa persona. Pero la verdad es que no soporto tu orgullo, tu egoísmo y tu egocentrismo. Sos mi completo opuesto. Sos ese hombre que jamás supera un éxito. No se quien estará más confundido.
Se que cada quien, en su día a día, esta en etapas distintas pero cuando se encuentran deben de saber estar en la misma página. Supongo que también eso me pasó con vos. Asumo que no eras para mí. Me he vuelto una persona sencilla. Sin orgullosos ni prejuicios. Una persona que cuando sabe lo que quiere, lo quiere por completo, pero miedosa. Con miedo a equivocarme. Miedo a que siempre sea igual; pero el miedo a fracasar nunca me impedirá jugar.
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