Ella está sentada en el jardín, contempla el renacer de las plantas y flores, sus ojos se pierden por un minuto en el vacío, siente que la naturaleza es parte de ella, y ella parte de la naturaleza. La gota que rueda por la hoja es una lágrima que se hunde en la tierra alimentando a la semilla. ¿Será un brote en su alma fecunda o será de una vez y para siempre el fin de todo?
Texto agregado el 02-11-2010, y leído por 479
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Lectores Opinan
10-08-2012
Disfruté mucho tu texto. Te hace sentir verdaderamente que eres parte de la naturaleza. kone
20-05-2012
Un relato que invita a reflexionar en el efecto del sentimiento afligido. Bella narrativa. ********** sirenadelmar