El mar y tu cuerpo.




Mis brazos elásticos,
el universo conspira,
nos aleja, nos estira y mis brazos te alcanzan, y te traen hacia mí desde el mar.
En el medio del océano de tu cuerpo, de tu oleaje,
un tsunami nos alcanza, nos baña, nos embruja, nos sacia las ganas,
se apaciguan tus manos salvajes sobre mis caderas ansiosas
y mi corazón tempano de hielo se calienta.
Se intensifica el silencio, se manifiesta la oscuridad,
Mientras mis labios recorren un camino conocido, trazando rutas rojizas,
carreteras centellantes de magia escarlata, de brisa marina,
un resplandor nos cobija y bañados en el mar, caemos en su profundidad.
Al lugar donde solamente tú perteneces.