Vuélveme a mentir, hazme importante nuevamente para ti, aunque sepa que otra vez es sólo una ilusión, vuelve a poner tus sugerentes miradas tras las hojas que presumía eran para mí, vuélveme a ilusionar con tus fábulas que me hacían volar; no como la verdad que me parte el corazón dejándolo yermo.

Vuélveme a esperanzar, hazme creer que me quieres aunque sepa nuevamente que es un fraude, vuelve a darme esas miradas tras las espaldas y un roce en la mano cuando nadie ve, devuélveme el juego de palabras robadas a un cantor, no como el silencio actual que me calcina, cubriendo mi mundo de cenizas.

Mi alma quisiera subir a la cúspide de mis penas y desde allí saltar al vacío para inmolar mi dolor, pero mi corazón quiere volver a ser presa de tus mentiras para volver a latir.

¿Vale más una mentira hermosa que te da vida a una verdad maligna que congele los pasos?

Vuélveme a mentir, vuelve a darme todo sin dar nada, devuélveme un sudor sin tocar, hazme trizas la verdad, quiero volver a soñar despierto en que quizás, sólo quizás, hay un ápice de verdad en tanto engaño y dolor, hay una pizca de esperanza en tanta falacia y soledad