Acerca de nuestra transformación de chamanes en águilas



La luna me ha acariciado de pronto,
y muchos hombres se han puesto el disfraz,
vestidos de dragones los diviso a los lejos jalando por el cuello a algunos lobos
pues hay luna llena y en el desierto sus aullidos se disparan en infinitas leyendas,
las cuales logran estremecernos, para luego elevarnos.

Ahora mi espalda flota sobre el arenal,
y aunque quisiera caer entre sus fauces no podría
aún soy inmortal,
en tus ojos y en lo míos,
porque en los de ellos solo estoy reflejada
levanto la cabeza, es improbable que caiga
mi vuelo es sideral
a lo lejos te veo… me llamas
pues tenemos que llegar hasta la luna y taparla con nuestras alas gloriosas,
magnificas, como tu, como yo

Ahora tu velocidad se entrelaza con mi canto,
y en pleno vuelo disonante mis labios escarlata se aproximan a tu sexo
sientiendo sus miradas reflejadas en tu espalda
entonces mis pupilas se disparan en un millón de margaritas violáceas
mutando en cristales sonoros penetrantes y amenazantes
dardos venenosos de amante interrumpida antes de trasladarte a un viaje espasmódico.

Convencidos y derrotados se han alejado
tus sonidos de ave enamorada ha callado los aullidos,

entonces podemos bajar a comer.