Siempre te creí mi dios
y ahora que te has ido... y ahora que te has ido eres un jodido diablo.
Has mancillado mi paz inteior aunque pensandolo bien nunca la tuve. Teniendo paz interior...es imposible decir estas tonterias. Tu me desestabilizaste. Por que seguí mi juicio y te amé. Porque no me dí cuenta antes del error. No quería y lo hice. Estar contigo. Probar. Empezar juntos una vida. Y ahora me abandonas como un puto perro. Como se puede ser tan hijo de perra....

Ya hace tiempo que no me meto con nadie, contigo DEBO.
Me siento en la necesidad.
NO quiero que te atropeye un camión ni que seas desgraciado para toda tu vida.
En si deseo lo mejor hacia tu persona. Perdoname. Me resigno a los hechos.
Me ha venido todo de repente y es la primera vez que aunque, sin odiarte, he estado cerca de hacerlo.
Y te culpo por no hablar claramente. Y me culpo por haber pensado en algún otro, alguna otra vez.
¿quien acabó siendo mas hijo de perra?

Estoy deprimida...y no me salen las lágrimas.
Estoy deprimida por mi. Nunca pensé que me vería en esta situación.
Y ahora he de empezar de nuevo sola, de 0, y esa idea me excita, ciertamente.
Que habrá tras la puerta número 2? El coche? El cheque de los 1000€?
Oh, vaya! Nunca pensé que me tocaría...nunca pensé que me tocaría un viaje hacia la introspección y reflexión... ¿Que si me gusta? Ciertamente no veo el momento de llegar a casa y hacer las maletas en mi mente e irme a volar entre la madeja de pensamientos que ahora mismo tengo. Cuando vuelva lo haré relajada, serena, nueva...y quizas algo más bronceada si una vez en mi trayecto me dá por pisar la playa.