El dolor de tu pena entumece y turba mi alma.
Contigo padezco tu intimo sufrir.
No sé verdaderamente que motivo
te abate tanto, que ni fuerzas
puedes en éstos momentos sentir.

Pero amado mio, no sufras a tal grado
porque no te han elegido, o quizás amado;
ni la vida has podido proseguir.

Tú eres lo que eres,
y tu existencia es lo que vale.
Eres justamente lo que eres,
y nada más se puede exigir.

Si te aceptas, te amas
y te comprendes a ti mismo
toda esa razón que ahora te angustia
se disolverá. Ya lo verás.

Porque, recuerda tesoro,
uno es lo que es...
y nada más!

Mia Minmina
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