Cada vez que acabo el trajín diario, le doy gracias a Dios por la oportunidad dada;
Me siento contento, porque yo sé que él está conmigo, no me abandona
Y más bien me guía; percibo y siento los mensajes q el me da;
En la sonrisa de un niño, en el esfuerzo de un emprendedor, en la experiencia de un viejo.
Padre tu realmente me das todo, definitivamente todo está servido, yo sé, que tan solo debo mover las fichas y empezar el juego; mi meta es el ahora, esforzarme al máximo y sacar todas mis potencialidades a luz; quiero tener una mejor nación y entregarte así una mejor creación.