son las cuatro de la tarde. mi hermano ha llegado a la casa luego de cuatro años sin verle ni leerle ni escucharle... dice que le fue muy bien. estoy caminando a la casa en donde sé que ya ha llegado mi hermano... no fui a esperarlo al tren porque no me siento con ganas de volver a verle luego de cuatro años... si hubieran sido dos, podría ser, pero ya es demasiado tarde... mi madre y padre están muertos, mi hermana está casada y tiene dos hijos de dos y tres años; y yo, estoy solo porque cuando él se fue, mis padres estaban mal hacía cuatro años... eso de los cuatro años es raro... estoy frente a la puerta de la casa y puedo escuchar las voces de mi hermana, marido e hijos por toda la casa... la de mi hermano no se escucha, es como si nunca hubiera llegado, pues, era hombre de pocas palabras, de mirada gacha y muy mal vestido... eso sí, era alto, fuerte y muy inteligente, por eso dicen que le ha ido muy bien en estos cuatro años... es mejor no entrar, sí, eso es mejor... he tomado un auto y con algo de dinero en el bolsillo pienso largarme lejos de la casa y no regresar hasta dentro de cuatro años, quizá tenga mejor suerte que mi hermano y cuando llegue a la casa encuentre algo así como quien se ha perdido y corre tras las faldas de su madre, llorando y sintiendo algo así llamado amor... |