Capitulo XVI
Tormenta


D
urante varios minutos ambos se miraron sin que ninguno hablara o hiciera algún movimiento.
Los sentimientos de Víctor eran encontrados entre saber que su madre estaba bien y el rencor que le guardaba.
- ¿estas bien hijo? – pregunto esta
Víctor asintió con la cabeza
- me alegro – los ojos de Romina se llenaron de lágrimas
Este volvió a asentir.
- hijo quizás cuando te explique entiendas – dijo Romina lentamente
- no hay nada que explicar me alegra que estés aquí y que estés bien, ahora me vas a contar como llegaste pero no pidas que vuelva a confiar en vos –
Ese comentario dolió a Romina en lo más profundo de su corazón pero la pregunta que vino ahora fue un golpe mas duro.
- ¿y Martín? – la cara de Romina fue suficiente respuesta, en ese momento supo que estaba muerto y no lo volvería a ver.
Víctor se arrojo al piso lleno de lágrimas, de odio, de tristura, de miedo, Romina hizo un ademán de acercarse pero Víctor lo alejo con brusquedad y no tuvo mas remedio que alejarse y ver como la persona que consideraba su hijo sufría.
- papa – dijo transformado en un mar de lágrimas.
Martín nunca había sido el hombre mas comprensivo del planeta, el mas cariñoso, el mas atento o el mejor padre, su carrera política siempre le había hecho tener una vida complicada y ocupada, pero era su padre, mal o bien siempre había estado y hasta ese momento no había sabido valorarlo, estos pensamientos eran los que se movían dentro de la mente de Víctor, grito, lloro, se lamento durante varios minutos en los que Romina lo dejo descargarse.
Finalmente se escucharon unos pasos y el primer rostro que se acerco fue el de Benjamin quien llego corriendo junto a Santiago que traía a Gabriel de la mano.
La reacción de Víctor fue instantánea apenas vio a un militar Acniano corrió hacia el empujándolo con todas sus fuerzas aun con lagrimas en los ojos.
Benjamin cayó al piso, cuando Víctor iba a lanzarse nuevamente sobre el Santiago se coloco en el medio, momento en el que Benjamin aprovecho a levantarse sacar su arma y con ella apuntar a Víctor.
- escucha hijo se que tiene uniforme Acniano pero estas equivocado el me ayudo a escapar -
- escucha joven no pienso traicionarlos, ni hacer nada que vaya a perjudicarlos, solo vine aquí para asegurarme que tu madre llegara sana y salvo, no quiero matarte ni lastimarte, solo quiero que te calmes ¿puedo bajar el arma? –
Luego de unos minutos de que Víctor entendiera que todos estaban calmados y que Benjamin no representaba ningún peligro asintió con la cabeza y el militar guardo el arma.
Tardaron varios minutos en el que el silencio fue incomodo, Romina y Víctor no cruzaron unas palabras, el joven aun no estaba pronto para hablar, el que si hablo fue Benjamin que explico por arriba mas o menos como habían escapado cuando las primeras gotas empezaron a caer desde el nublado y oscuro cielo.
- muy pronto empezara a tronar – dijo Santiago – creo que lo mejor será entrar y seguir esta conversación adentro -
Idea que todos aceptaron.
El rostro de Romina estaba lleno de terror mientras avanzaban a la cabaña de María pensando en la reacción de esta al verla, Víctor al ver su cara de preocupación enseguida se dio cuenta de cual era el motivo pero prefirió no decirle a Romina que en realidad su madre no conocía la verdad, prefería castigarla.
Los pasos de Benjamin eran seguros y despedían una total alegría, los pasos de Romina llevaban angustia y temor, ese era el momento que tanto había estado esperando.
Finalmente llegaron a la casa y Víctor entro primero seguido de todos los demás.
- tenemos visita – dijo al entrar y María giro la cabeza confundida, al ver a Romina se calmo ya que era solo una mujer pero apenas entro Benjamin se puso en posición para atacarlo cuando Santiago lo calmo.
- cálmate ya se lo que piensas, pero te explicaremos todo-
Esta se calmo y asintió, todos se sentaron en ronda en el piso, Víctor quiso sentarse cerca de María pero esta se levanto y se coloco entre Santiago y Gabriel, Benjamin separaba a Romina y a Víctor.
- es cierto era militar Acniano pero resulta que no estaba de acuerdo con lo que mi país estaba haciendo – comenzó a explicar Benjamin – cuando me pidieron torturar a Romina no pude soportarlo -
- yo llevaba varios días encerrada por ser la esposa de un político importante de la antigua Seida creían que tenia información sobre los políticos que se escaparon –
- lo cierto es que ella no sabia nada – continuo el militar – así que no podía matarla como querían ellos, elaboramos un plan de escape tras atacar a mi superior y a un compañero logramos fugarnos-
- más o menos recordaba la ubicación de la cabaña según lo que había escuchado decir a tu padre – dijo Romina mirando a Víctor dudando al momento de decir la palabra padre – pero no sabia con exactitud, Benjamin me escolto hasta el bosque, por cierto ¿Qué paso con William? –
Otra punzada de dolor invadió a Víctor casi tanto como la que había sentido al saber de la muerte de su padre, este intentaba no recordarse del chofer, bajo la cabeza intentando contener las lagrimas entonces fue María quien respondió por el.
- lo lamento, el auto perdió el control, cuando escuche el impacto Salí enseguida, vi a un hombre muerto y a Víctor herido, lo traje para acá y intente curarle las heridas -
- ya veo – dijo Romina bajando la mirada sin decir nada, nadie dijo nada, todos respetaban su duelo en paz.
Todo hubiera quedado en silencio si no fuera por la tormenta, las gotas que caían con fuerza del cielo golpeaban el techo de la cabaña y los primeros rayos iluminaban el nublado cielo seguido por un estruendoso trueno que retumbaba en toda la cabaña.
También comenzaba a oírse las ramas de los árboles que se batían con fuerza como si quisieran desprenderse de los troncos que las aferraban al suelo.
Finalmente Romina rompió el silencio.
- debemos tener cuidado - dijo señalando al techo
- no te preocupes – dijo María – esta cabaña a soportado muchas tormentas y aun continua de pie –
Romina asintió con la cabeza.
- dio la casualidad que nos encontramos con este buen hombre y este niño – continuo Benjamin
- ¿te quedaras acá verdad Benjamin? – pregunto Romina con vos esperanzadora
Este negó con la cabeza.
- lo lamento debo irme mi familia me esta esperando en algún lugar de Acnia, sospecho que deben haberlos detenido y yo debo ir por ellos –
- te mataran – dijo María
- escuchen lo se pero debo ir es algo que debo hacer, cuídense –
- al menos espera a que pase la tormenta – pidió Romina levantándose
- de acuerdo – acepto el ex militar escuchando como el viento azotaba con furia los árboles, sabia que era peligroso salir ahora.
- pero mañana me iré y dudo que volvamos a vernos –
Todos aceptaron sabiendo que no podían detenerlo.
Intentando distraerse los temas de conversación que continuaron fueron distintos y livianos así podían pasar unas horas tranquilos olvidándose del mal momento que estaban pasando, al menos eso querían aparentar, era imposible sacarse de sus mentes todo el mal que acontecía en el mundo.
Era pasada la medianoche cuando decidieron comer algo, la tormenta continuaba con brutalidad, aprovechando los alimentos que habían traído Benjamin y Romina comieron y disfrutaron como ya no se disfrutaba, luego bebieron su trago de agua permitido por persona.
- vamos a dormir – propuso Víctor – luego continuaremos esta conversación, deben estar cansados -
Todos aceptaron la idea de buena gana y buscando cada uno el lugar que podía se acostaron a dormir.
Romina se acerco a Víctor y lo agarro del brazo mientras todos permanecían acostados.
- creo que tenemos que hablar – dijo casi implorándole – déjame explicarte -
- mañana – acepto este – estoy cansado y necesito dormir al igual que tu –
Romina asintió con la cabeza.
- te quiero hijo – dijo mientras se alejaba
- y yo a ti Romina – las ultimas palabras de Víctor se perdieron con el ruido de la lluvia nocturna y mientras este se intentaba dormir Romina lloraba por el dolor de sentir que había perdido un hijo.
A pesar de proponer la idea de conciliar el sueño Víctor sabia que no dormiría durante la noche y así fue, no logro descansar medio minuto, si intentaba cerrar los ojos la imagen de Martín aparecía frente a el por lo que finalmente se rindió y decidió observar el techo mientras esperaba a que amaneciera.

Fuera de la cabaña agachad sin animarse a moverse y estando muy incomodo a demás de adolorido Oscar intentaba pasar inadvertido mientras vigilaba la cabaña desde lo lejos.
A pesar de su incomoda situación el militar tenia una sonrisa de satisfacción en su rostro.
“ya di aviso” se dijo satisfecho “que encontré una cabaña con prófugos del nuevo gobierno, pronto llegara Cesar Diron con una tropa de hombres y mataremos a los traidores y yo recibiré mi reconocimiento”

Capitulo XVII
El difícil
Arte de Perdonar


A
Primera hora de la mañana Gabriel fue el primero en despertarse mientras todos continuaban dormido, el niño se acerco a la ventana y comprobó con alegría que la tormenta había pasado.
Los demás estaban dormidos incluyendo a Santiago a quien el niño observo con cariño.
Eran ellos.
Si bien el niño había aprendido a encariñarse con María y Víctor a quienes veía como una madre y un hermano, consideraba a Santiago no solo un padre si no mucho más, alguien especial, una persona sin la cual no podía vivir.
“nunca me olvidare de mis padres” pensó el niño “pero es hora de intentar vivir de nuevo”
Un bostezo y un movimiento brusco atrás suyo hizo al niño darse cuenta que alguien se estaba levantando luego de el.
Cuando giro la cabeza vio a Víctor quien tenía los ojos abiertos lleno de ojeras, señal de que había dormido poco o mejor dicho no había dormido.
- voy a jugar… afuera – dijo el niño lentamente, aun no hablaba con claridad, Víctor pensó que era peligroso pero al ver al niño hablar por primera vez los ojos se le llenaron tanto de lagrimas que accedió con una felicidad inmensa, Gabriel sonrío y salio por la puerta.
Víctor aun contento tras la noticia de que Gabriel cada vez se animaba más a hablar ase levanto ya de mejor animo cuando escucho una voz que se dirigía a el.
- lo lamento hijo – dijo Romina – se que cometimos errores con tu padre pero queríamos lo mejor para vos -
María ya había abierto los ojos pero no se animaba a hablar, quería dejar este momento que fuera personal de ellos, por lo que fingió estar dormida.
Víctor y Romina lloraban intento hacer silencio, no quería que los demás escucharan sus tristezas y se compadecieran de ellos.
- creo que lo mejor va a ser ir afuera – dijo Romina – María podría despertar -
Víctor asintió con la cabeza ya que la vos no le daba para hablar.
La ex prostituta al escuchar esto pensó en que algo raro ocurría y apenas ambos salieron de la cabaña cerrando la puerta tras ellos con el mayor silencio posible María camino hacia la ventana acercando su odio para escuchar, por la rendija de ventana que permanecía abierta durante las noches.
- ser madre y padre es algo mucho mas que hayas nacido de mi cuerpo, lo admito no somos madre e hijo de sangre pero aun somos madre e hijos -
Víctor no paraba de llorar pero aun sentía la furia y el rencor dentro de el, este era el momento para largarlo todo.
- me arrebataste de los brazos de mi verdadera madre, tal vez no era rica pero me quería y me hubiera cuidado -
- lo se – grito Romina llorando – créeme que lo se y yo y tu padre lo lamentamos toda la vida, fue un error que no tenia vuelta atrás-
- VE PENSANDO COMO DECIRLA A MARIA QUE ES MI MADRE – Víctor escupió estas palabras con odio y todo quedo en silencio por varios segundos.
María estuvo varios minutos procesando esto hasta que por fin comprendió lo que significaban estas palabras, se levanto con furia del suelo y hubiera salido a asesinar a Romina si Benjamin y Santiago actuando en equipo no se hubieran levantado y entre ambos arrojado sobre uno de los colchones.
- déjame asesinar a esa perra – grito María pero ambos que habían escuchado toda la historia despertándose por los gritos no la dejaron avanzar.
- entiendo lo que te pasa – dijo Santiago – pero por favor María reacciona déjalos hablar y luego ve –
La mujer hizo un nuevo intento de levantarse pero Benjamin se coloco en su camino.
- piensa con claridad – le dijo mientras la arrojaba con suavidad sobre el colchón, ¿Qué es lo que quieres? Abrazar a tu hijo o golpear a una mujer -
Estas palabras cayeron como agua helada sobre María, era verdad lo que importaba no era vengarse de Romina, si no que ahí estaba, su hijo, su verdadero hijo, el que había estado buscando y esperando durante tantos años.
La discusión se tornaba cada vez mas violenta.
- lamento lo que paso pero yo te amo hijo -
- no me digas así – escupió Víctor con asco – no me digas hijo, tu no eres mi madre de la misma forma que aquel hombre no era mi padre -
- se como debes sentirte pero tu padre estaba arrepentido por eso te envío aquí para que te reencontraras con tu madre, tu verdadera madre –
- no importa Romina –
- entiendo que estés enojado, que cueste asumir la situación, y discúlpame fui idiota, deseaba tanto tener un hijo, amarlo, cuidarlo, darle todo mi corazón y no podía –
- porque no adoptaste – pregunto Víctor quien ya se había calmado y relajado y estaba sentado sobre una roca sujetándose la cabeza con las manos mientras lloraba sin control, Romina se dio cuenta que aun no comprendía el hecho que Martín ya no estaba.
- lo siento era joven idiota y cometí un error –
- no es excusa –
Romina camino hacia Víctor que seguía llorando y se arrodillo colocando sus manos en las rodillas de este y acercando su rostro para que se miraran fijamente a los ojos.
- hijo te amo -
- y yo a vos eso nunca va a cambiar, solo que, creo que ya nada va a poder ser igual, si sobrevivimos a esta ESTUPIDA GUERRA –
- me das un abrazo – pidió Romina con los ojos tan llenos de lagrimas junto a pena y dolor que Víctor no pudo negárselo, fue el abrazo mas emotivo que una persona pueda imaginar lleno de amor y cariño.
María quien no había escuchado la última parte de la conversación pero vio el abrazo comenzó a llorar con más intensidad, su hijo había perdido todo el rencor y ella tendría que seguir su ejemplo.
Su mirada de odio intenso se calmo y Benjamin y Santiago supieron que ya era hora de dejarla ir, ambos se miraron y asintieron con la cabeza en el momento que se alejaban para que esta saliera.
María salio con paso lento, ahora que tenía a su propio hijo a unos metros de distancia no estaba tan segura de cómo hacer, pero si que tenia que hacerlo, abrió la puerta lentamente y la primer mirada con la que se cruzo fue con la de Romina, quien apenas vio su rostro supo que había escuchado la conversación.
Sus brazos y los de Víctor se despegaron y provoco que este se diera vuelta hacia María.
Ambos se miraron con miradas confundidas ninguno sabia como actuar en esa decisión, se miraron durante varios segundos y finalmente Víctor corito hacia los brazos de su verdadera madre lleno de alegría y amor.

Oscar permanecía escondido desde lo lejos, desgraciadamente no había escuchado la conversación salvo algunas pocas palabras sueltas.
Aun no conocía cuantas personas se escondían en esa casa pero sea como sea, Cesar Diron se dirigía hacia allí con un buen numero de hombres, todo aquel que estuviera en la cabaña perdería la vida dentro de poco se repetía alegremente Oscar convencido que muy pronto el seria beneficiado.
“Tal vez pasare a ser general como Cesar” cuando pensaba esto casi se ponía a llorar de la alegría.
Lo único que tenia que hacer era esperar a la llegada de Cesar.
Pero toda esa alegría y esperanza de ascender como militar se esfumaron en un segundo, vio a un niño que lo miraba con miedo.
Ambas miradas se cruzaron.
“debo matar al niño o si no va a decirles a los otros y todos van a escapar o a venir a buscarme y yo solo no podré”
Oscar desenfundo rápidamente el arma pero el niño salio corriendo asustado en dirección a la cabaña, debía llegar a el antes que el llegara a los demás si no, todos sus planes estaban acabados.
Se lanzo a correr en dirección al niño.

El abrazo entre madre e hijo duro varios minutos, minutos sagrados que nadie interrumpió.
Apenas se separaron, Víctor miro a Romina, pero no dijo nada.
Benjamin y Santiago que aun seguían en la cabaña se sentaron sobre uno de los colchones
- es bueno un poco de paz – comento Benjamin mientras prendía un cigarro
- si la verdad que si – coincidió Santiago – últimamente no se ve paz a nivel mundial ni personal –
- verdad, maldita época en la que nos toco nacer – dijo Benjamin mientras daba una pitada al cigarro
- ¿y que sabes de la situación mundial? – Pregunto Santiago – es decir podríamos intentar escaparnos hacia otro continente –
- olvídate de eso – negó Benjamin – según lo que nos comunicaban a mi y a mis compañeros la situación a nivel mundial es peor o igual que acá, según lo que se países como Alemania, Estados unidos, Inglaterra o Francia han decidido colonizar a países inferiores, el continente africano prácticamente ha desaparecido del mapa, al igual que estados chicos como Holanda, Nepal, Belice han sido invadidos al igual que nosotros y les han arrebatado toda su agua, el mundo entero esta cayendo y la raza humana lo único que hace es empeorarlo –

- yo se que no hay forma de pedir perdón – dijo Romina con la cabeza baja sin animarse a mirar el rostro de María – pero podrimos intentar vivir en paz aunque Víctor ya no sea mi hijo -
- te equivocas – dijo María firmemente – el no dejo de ser tu hijo, ustedes le dieron todo lo que yo no pude y ahora que esta de vuelta yo vuelvo a vivir, desearía que las circunstancias hubieran sido otras, pero aprenderé a sacar el rencor que hay dentro de mi corazón con el tiempo –
Romina asintió y estiro su mano, María dudo un momento pero se puso a pensar en lo importante que seria para Víctor verlas bien así que apretó la mano de Romina en muestra de paz.
Los ojos del joven se llenaron de lagrimas de emoción, lagrimas de tristeza, si le preguntaba no sabría decir porque lloraba si por ver a las dos mujeres bien o por la muerte de Martín pero aun así, el lloraba.

- es horrible – dijo Santiago con tristeza
- si, desgraciadamente esto es lo que somos, el hombre – Benjamin tiro las cenizas del cigarro y salio a tomar un poco de aire libre.
Santiago salio atrás de el:
- GABRIEL – grito con fuerza pero nadie respondió
- esta jugando – dijo Víctor mirando hacia el ex sirviente
El mayordomo asintió con la cabeza contento de ver como Gabriel poco a poco volvía a la normalidad.
- vamos a la casa – propuso Víctor – tenemos muchas cosas que planear sobre nuestro futuro -
Benjamin asintió.
- de acuerdo, luego me iré, no quiero importunarlos -
- no, por favor, quédate, come algo y luego planearemos – dijo Víctor – iré a ayudarte a encontrar a tu familia así como vos me ayudaste a reunirme con la mía –
- y yo – dijo Santiago sonriendo – tu solo es demasiado peligroso –
- estoy de acuerdo – dijo Víctor – entre los tres podremos liberarlos y traerlos hacia aquí –
Los ojos de Benjamin se llenaron de lagrimas, aunque sabia que lo que iban a hacer era una locura se sentía contento de no hacerlo solo, le hubiera gustado decir, no gracias yo puedo ahora que esas personas estaban juntas pero sabia que no iba a poder solo, aunque dudaba enormemente que pudieran hacerlo todos unidos tenían mayor oportunidad.
María y Romina a pesar que no les gustaba la idea ninguna dijo nada sabían que Benjamin se lo merecía.
- creo que voy a buscar a Gabriel – dijo Santiago – solo para asegurarme que este bien -
- el esta bien – dijo Víctor – simplemente esta comenzando a disfrutar la vida nuevamente –
Santiago asintió.

Dejar atrás a Oscar no fue tarea difícil, el soldado no estaba muy bien entrenado en la parte física si bien era buen tirador siempre lo hacia a distancia, mas bien era un francotirador pero en esta ocasión no podía disparar debido a que el estruendo que provocaría la bala alertaría a todos que algo ocurría y no sabia con exactitud cuanta gente estaba en la cabaña, resbalando con el barro debido a la lluvia del día anterior mientras corría intentando cazar al niño, Oscar cayo al suelo mientras sentía los pasos de Gabriel alejándose.
Maldijo en voz baja.
“pronto todos sabrán que estoy yo y podrán prepararse de seguros tendrán armas y serán mas de 30 hombres, no lo se pero debo avisar a Cesar… no, si lo hago se arruinaría mi asenso a la sima”
Gabriel corriendo lleno de lagrimas llego a la cabaña y abrió la puerta violentamente, esto hizo que todas las miradas se fijaran en el.
- militar Acniano afuera – fue lo único que dijo sin poder dejar de llorar

Capitulo XVIII
Disparar a matar

C
esar Diron estaba dirigiéndose hacia el lugar donde debía encontrarse la cabaña según las indicaciones que había dado Oscar.
El jefe militar se transportaba en una camioneta mientras tras suyo iban tres camionetas mas repleta de soldados prontos para disparar a quien hiciera falta.
Cesar podría haber mandado a sus hombres solos sin necesidad de que el abandonara la base pero quería ver cara a cara a esa mujer y a ese traidor y matarlos el mismo, por su culpa había perdido a uno de sus mejores y mas fieles hombres y había tenido que estar haciendo reposo durante dos días debido a las lesiones provocadas por Romina.
Cesar cerro el puño con ira.
“ahora veremos que hagan cuando me encuentro nuevamente con ellos” hacia mas dos semanas que Cesar no dejaba de pensar en ese momento, momento en el que Romina estuviera arrojada a sus pies rogando por su vida y pidiéndole clemencia.
Los rumores sobre los hechos ocurridos en la cámara de tortura eran varios entre los soldados, pero Cesar había tenido que calmarlos y obviamente no había contado la realidad de lo ocurrido.
Lo que había hecho público Cesar había sido esto:
- queridos soldados, todos son consientes de la fuga que tuvo lugar hace poco tiempo donde un militar ayudo a escapar a una prisionera – Cesar hizo un aliento para continuar, segundo en el que todos asintieron con la cabeza – bueno, me temo que este acto de traición no fue realizado solo por el soldado Benjamin cuya familia ha sido detenida por alta traición, si no que el soldado Gonzalo Cunees también ha intentado ayudar a la detenida a escapar, me vi obligado a matarlo con todo el dolor del alma porque el era un compatriota que hasta ese momento yo pensaba que luchábamos por un mismo fin, que nuestro país sobreviva al fin del mundo, pude asesinarlo pero en ese momento el soldado Benjamin me golpeo con su arma en la nuca, esto me dejo inconsciente y así se produjo el escape -
Una ola de murmullos se junto en el lugar llenos de comentarios sobre Gonzalo que nadie lo imaginaba traidor.
- he dado alerta a las cuatro reservas militares que en el caso que Benjamin acuda a una de ellas lo dejen pasar y que designen a un hombre a seguirlo, así guiarnos hacia donde se dirigen, sospechamos que puede haber algún refugio al cual ambos estén yendo y ahora me retiro – Cesar hizo un gesto de despedida a sus hombre y entre aplausos y gritos de apoyo Cesar se dio vuelta y sonrío satisfecho.
No le importaba haber ensuciado el nombre del soldado mas leal que había tenido, solo estaba feliz de que su nombre estaba bien parado.
Al día siguiente de la afortunada fuga protagonizada por Benjamin y Romina de la base militar había llegado la noticia de que como sospechaba Cesar Benjamin había ido a una reserva y llevado varias cosas, un hombre llamado Oscar había ido en su búsqueda.
Al día siguiente aproximadamente a las diez de la noche Oscar se había comunicado con el.
- señor Diron saludos – dijo el soldado – estoy vigilando a los prófugos tal como me fue encomendado, la mujer estaba esperando en un edificio abandonado, el luego de dejar la reserva ha ido junto a ella e iniciado un viaje en dirección sur, hacia unos bosques, los estoy siguiendo, por la seguridad con la que viajan digo yo que tienen un punto en concreto al que se dirigen -
- bien soldado – asintió Cesar con alegría mientras se tomaba un café – siga así, infórmenme de cualquier novedad y si llegan a su destino dígame exactamente donde es, iré yo mismo personalmente –
Así fue durante os dieciocho días que duro el viaje Benjamin y Romina continuaban su camino firmemente mientras Oscar enviaba informes sobre lo que ocurría.
- señor – dijo Mauricio a que Cesar había llamado para preguntar por un tema exterior al de Benjamin – cambiando un poco de tema ¿Por qué esta tan seguro de que Benjamin va a algún refugio? -
- es evidente – dijo Cesar con una mirada que reflejaba gran astucia – Benjamin debe de saber que su familia ha sido detenida debido a que esta ya tenia varios problemas con el gobierno de Damian Tor, pero como reconocimiento por los servicios de Benjamin estos no fueron detenidos, el debería ir por ellos aunque sea una locura es su familia, pero si fue en dirección contraria porque tiene un destino fijado –
- nunca lo había pensado así – dijo Mauricio analizando las palabras de su superior.
- y usted prepárese soldado apenas Benjamin y esa mujer lleguen a su destino nosotros iremos en su captura –
Mauricio asintió con la cabeza hizo un saludo y se retiro.
Así fueron pasando los días hasta que finalmente la llamada que tanto esperaba Cesar llego.
Oscar llamo diciendo que tenía las indicaciones de la ubicación del escondite de Romina y de Benjamin y con ello trajo la noticia de que había otras personas.
Cesar llamo a treinta de sus hombres y los formo en fila apenas tuvo la noticia.
- escuchen todos – dijo con voz de mando – el fugitivo Benjamin con la prófuga han sido vistos en una cabaña que esta escondida, debemos atacar y matar a todos los presentes, ustedes han sido seleccionados para ir en esta misión junto a mi -
- pero señor – dijo uno de los hombres - ¿Cuántos son? –
- el espía no supo precisar con exactitud este tema debido a que no pudo acercarse por más de unos pocos minutos debido a que corría el riesgo de que alguien lo viera-
Todos asintieron con nerviosismo, a nadie le gustaba o convencía la idea de ir a un refugio sin conocer cuantos enemigos eran o que tan preparados estaban.
De por si muy pocos militares no hubieran ido si se les hubiera dado la oportunidad de elegir debido a que dentro de sus mentes ninguno en realidad apoyaba la guerra, lo que estaba ocurriendo era una total destrucción de los derechos humanos y todos lo sabían, por mas que el presidente y los generales intentar convencerlos de que estaba bien debido a que ellos se lo merecían todos conocían la verdad, Damian Tor era un dictador que si bien buscaba un resultado que todo Acnia se vería beneficiado el camino por el cual buscaba alcanzarlo no era uno que se pudiera sentir orgulloso ningún ciudadano de Acnia.
Muchos y en este caso la mayoría aunque ninguno se animaba a hacer publico esta afirmación pero todos estaban de acuerdo con lo que habían hecho Benjamin y Gonzalo (en realidad ninguno de ellos, a excepción de Cesar Diron sabían que Gonzalo no solo no había ayudado a Benjamin a escaparse si no que lo había intentado detener y esto es un hecho que nunca se aclararía ya que Benjamin prefirió nunca aclarar la verdad para no ensuciar el buen recuerdo de Gonzalo que todos mantenían )
Así fue como el ejército fue reunido.
Esa tarde tres camionetas partieron rumbo según las indicaciones que Oscar había dado.
Faltaba poco para llegar a la cabaña, las camionetas iban a detenerse unos trescientos metros antes así de esta forma asegurarse que no pudieran escuchar el ruido de los motores.
Apenas las camionetas se detuvieron salio Cesar Diron de ellas y poco a poco los treinta hombres que lo acompañaban.
Oscar salio a recibirlos y Cesar le hizo un gesto de saludo.
- muy bien soldado ha hecho un excelente trabajo cuando regresemos usted será beneficiado -
Este asintió orgulloso de si mismo.
El cielo comenzaba a nublarse lentamente como si fuera señal de que algo malo ocurriría.
Oscar prefirió no contar que el niño lo había visto y luego se le había escapado ya que ese hecho arruinaría todo el merito que tanto trabajo había conseguido obtenerlo.
Mauricio quien en un momento había sido amigo de Benjamin vivía con pena esta situación, ya una vez se había visto obligado a disparar a su antiguo compañero cuando este corría con la prófuga y se había arrepentido de esto.
- señor – dijo cuando tuvo la oportunidad de estar cerca de Cesar – entiendo porque motivo debemos ejecutar a Romina y a Benjamin pero ¿los otros? Dejémoslos igual morirán de sed o hambre aquí solos -
- no, no lo harán soldado Mauricio me extraña de usted, un día cuando se le acaben las provisiones Irán a la ciudad a atacar las bases, si tiene éxito robaron nuestro alimento, nuestra bebida –
- pero es su alimento y su bebida señor esto no tiene que ser así –
Cesar miro a Mauricio de la misma forma que había mirado a Benjamin en su momento, con desconfianza.
- escucha Mauricio te hablo porque te aprecio y se que eres un soldado fiel, yo no hice las reglas fue Damian Tor, nuestro gobernador, lo cierto es que no todos pueden estar de acuerdo con los caminos pero todos se verán beneficiados inclusos los presos, así que por favor no hagas mas ese tipo de comentarios, podría ser interpretado como traición y no me gusta -
Cesar se retiro y camino hacia Oscar quien estaba aprovechando para comer de buena forma.
- atención soldados – dijo Cesar con una voz que todos escucharon – esta noche atacaremos, pero les Hare una aclaración, se ha acabado la piedad, déjenme a Romina y a Benjamin para mi necesito hablar con ellos antes de ejecutarlos -
Lo cierto es que Cesar quería vengarse no había contado lo que había ocurrido en realidad en la cámara de torturas por no contar que una mujer lo había golpeado y lo había dejado inconsciente al darle su cabeza contra el suelo violentamente.
- lo que quiero decir que esta noche no tiene que haber piedad, sean mujeres, sean niños, ancianos o hombres fuertes, enfermos, sanos, débiles, inválidos, discapacitados, gordos, flacos, NADA IMPORTA , dejamos la parte humana de lado esta noche NO HAY PIEDAD, esta es la regla disparar a matar sin dejar sobrevivientes -

Capitulo XIX
El plan de escape

T
odas las miradas se concentraron en ese momento en Gabriel quien miraba nervioso para todos con los ojos llenos de lagrimas por los nervios, ninguno dudo de que lo que había dicho era real, todos creían en el niño.
Instintivamente todas las miradas pasaron de Gabriel a Benjamin.
- deben habernos seguido a mi y a Romina – dijo deprimido – todo se terminará ahora no hay esperanzas -
Los ojos del militar se llenaron de lágrimas y preso de un gran dolor cayó en la más profunda depresión.
Santiago fue enseguida a abrazar a Gabriel quien recibió el abrazo y el cariño como si fuera de su padre.
- no – dijo Víctor en voz alta para todos – no debemos rendirnos, Benjamin debes ir por tu familia, María y yo nos hemos juntado, Santiago debes establecerte junto a Gabriel todos tenemos metas que hacer en el futuro no podemos rendirnos acá -
- ¿Cuántos eran? – pregunto Benjamin con la cabeza mirando al piso
- uno – respondió Gabriel
- seguramente sea el que nos siguió pronto vendrán mas –
- Benjamin eres el único que podría organizar un plan de escape – dijo Romina caminando hacia su compañero de viaje – confío en ti y ellos también –
- no se cuantos hombres serán – negó el ex militar Acniano – podrían ser diez o mas tal vez mil lo mejor va a ser rendirnos –
- rendirnos – repitió Romina la palabra con asco – Benjamin, nos escapamos de un campo militar, atravesamos una ciudad entera llena de soldados para venir hasta aquí y dices de rendirte-
Estas palabras dichas por Romina cayeron en Benjamin con tanta fuerza y maldad como si un indígena le hubiera apuntado con una flecha y disparado dándole directo en el corazón.
Pero eso sirvió, recobro el valor y sonrío intentando convencerse de que debían luchar.
- si nos atrapan estamos muertos – dijo Víctor viendo mayor seguridad en la mirada del soldado – si luchamos tenemos una oportunidad de escapar, vale la pena intentarlo-
- tienes razón – Benjamin se levanto del asiento con mayor seguridad reflejada en sus ojos – pero eso significa su ayuda –
- cuenta con nosotros – dijo Santiago con rostro serio – yo prometí cuidar a este niño y voy a dar mi vida por eso si es necesario –
- cuando fui a la reserva traje conmigo armas – dijo Benjamin con tono pensativo – eso significa que tendrán que disparar y tal vez matar -
- entiendo – dijo Víctor simplemente y nadie dijo mas nada.
- iré a ver – dijo Benjamin – revisare los alrededores, NADIE más salga –
Antes que cualquiera pudiera oponerse a la idea el soldado salio por la puerta hacia la fría tarde de invierno cerrando tras de el la puerta y dejando a todos con el temor de no volver a verlo.
- hijo necesito hablar contigo – dijo Romina y agarro a Víctor de la mano llevándolo a un rincón aparte ignorando las miradas curiosas de todos.
Romina miro a Víctor y sus ojos estaban llenos de lágrimas mientras coloco su mano en el cuello quitándose una cadena con una M y dándosela a Víctor colocándosela directamente en el cuello.
- esta M me la dio tu padre el día antes de nuestra boda quiero que lo lleves contigo, es una forma que Martín este siempre contigo -
Víctor no dijo nada simplemente se le llenaron los ojos de lagrimas y quedo en un profundo silencio
Benjamin buscaba tranquilamente donde podían encontrarse el o los militares que estuvieran allí.
Lo primero que hizo fue revisar todas las zona que estaban a menos de cien metros de la cabaña pero al ver que aparentemente no había nadie se alejo un poco en todas las direcciones.
Cerca de entrar en la desesperación y luego de haber buscado durante treinta minutos Benjamin se sentó sobre el suelo húmedo a llorar tranquilo.
¿Por qué yo?
Entonces su mente lo llevo a un mundo de recuerdos que no quería, los recuerdos de cuando le habían informado que seria obligado a dejar Acnia:
En ese momento Benjamin era un militar al servicio de Acnia normalmente era encargado de vigilar la entrada de la base militar Acniana en la capital.
Pero no ese día, esa tarde Benjamin descansaba como cualquier hombre mirando una película con su mujer Jazmín a su lado y su hijo Michael que descansaba en la cuna dormida profundamente.
La película era una película de acción normal como hay miles en la que un hombre con grandes y fuertes músculos se enfrenta a cincuenta luchadores ninjas y les gana a todos y al final se besa con una mujer que es perfecta.
Era lo mejor que había encontrado no era muy bueno pero así pasaban un tiempo juntos, fue cuando sonó el celular de Benjamin.
Este lo agarro y lo único que el mensaje decía era “lee tu email”
Con pereza el soldado se acerco a su computadora y entro a su correo, enseguida vio un email que no estaba leído este era del correo oficial del servicio militar.
“Estimado soldado al servicio militar de la nación de Acnia has sido seleccionado junto a otro numero de soldados para realizar un servicio especial militar, mañana deberá asistir a una charla en la que se les explicara la situación en la que el país se encuentra, posiblemente deberán abandonar su país y a sus familias por un cierto periodo de tiempo pero todo esto se les confirmara mañana, los esperamos a las catorce en la oficina central del general Cesar Diron”
Al otro día tal como decía el email Benjamin acudió al lugar establecido a las catorce junto a Mauricio su amigo de la infancia que seguía la misma carrera que el.
Cuando llegó encontrar a otros conocidos como Gonzalo con quien Benjamin no tenía buen trato.
Finalmente Cesar hablo.
- esta reunión es total y absolutamente secreta que fue organizada por nuestro amado presidente Damian Tor -
Cesar hizo unos segundos de silencio y luego continuo – ustedes saben que hemos disminuido el consumo excesivo de agua colocando una multa casi millonaria a aquellos que sobrepasen el límite establecido dependiendo el número de personas que habiten por hogar – todos asintieron con la cabeza esto no era ninguna novedad el agua cada vez era mas escasa y se controlaba su consumo - pero esto no es suficiente por eso se ha tomando una decisión. Invadiremos el resto de los países de la isla Libertad -
Cuando Cesar dijo esto enseguida se produjo un gran griterío lleno de criticas, insultos, muchos militares tenían familiares en otros países.
- NO se preocupen – dijo Cesar – sus familiares vendrán aquí tienen una semana aquellos amigos, parientes podrán llegar a Acnia no se cerraran los aeropuertos al menos durante un periodo de siete días –
Estos conflictos se estaban dando a nivel mundial pero todos habían pensado que la isla de la libertad no iba a llegar a estos acontecimientos.
Pero todo estaba escrito, nadie podría escapar al fin.

- curioso – dijo María mientra observaba el rostro de Víctor mirando la medalla con la letra M – cuando escuche el accidente y te saque de aquel auto mientras buscaba medicinas en tu mochila y vi que tenias drogas pensaba ¿Qué haría yo si mi hijo estuviera en este mundo? Me deshice de ellas pensando en ti como si fueras mi hijo, me estaba engañando a mi mismo y ahora se que no fue así que si eras mi hijo -
- todo esto fue muy confuso – dijo Víctor sin desviar la mirada de la M – perdimos mucho tiempo pero prometo que aparir de ahora lo aprovecharemos -
- lamento no haber podido estar en tus mejores momentos-
- lo lamento yo – dijo Víctor – pero todo esto, hace tan solo un año creía que al consumir droga era superior a todos, me sentía poderoso y ahora me doy cuenta de que no, este tiempo sin poder consumir me costo pero siento como si hubiera fenecido, comenzado de nuevo –
- lo has hecho – dijo María y el y Víctor se abrazaron con amor y dulzura, ninguno estaba seguro de que ocurriría continuación, si escaparían y la guerra terminaría o morirían allí o tal vez serian capturados, pero en este tiempo viviendo juntos, Santiago, Gabriel, María y Víctor conseguido algo que les ayudaría en su futuro fuera claro y alegre o negro y oscuro, habían conseguido una unidad increíble en el que todos compartían los dolores del otro, si uno estaba triste todos sufrían y si uno estaba alegre todos reían.

Concentrado y casi sin recuerdo de la realidad detrás suyo Benjamin perdió su concentración y salio de su mundo de recuerdos.
Un ruido detrás de Benjamin lo trajo nuevamente a la cruda realidad.
Dejo el mundo de los recuerdos para adentrarse al lugar donde se encontraba.
Sentado en el suelo, descansando las piernas luego de una hora de buscar sin éxito alguna pista de la ubicación de los soldados Acnianos.
Se levanto del suelo estirando las piernas y coloco su mano en la funda del arma.
El ruido había sonado a alguien que pisaba una rama y esta se partía o pisando un grupo de hojas secas.
Sea cual fuera ese ruido, era señal de que no estaba solo allí.
Alguien cargo el arma detrás de él y Benjamin sin mirar supo que lo estaban apuntando con el arma
- date vuelta lentamente – dijo el soldado – no quiero matarte solo quiero hablar -

Capitulo XX
Una única oportunidad
Para escapar

N
erviosos todos esperaban la llegada de Benjamin quien después de dos horas de haberse ausentado no regresaba.
Inconscientemente y sin que nadie lo digiera en voz alta todos esperaban lo peor.

Benjamin giro lentamente sin intentar sacar su arma en el momento en el que escucho la voz supo quien era y supo que era el único en quien podía confiar.
Mauricio lo miraba sin dejar de bajar el arma.
- amigo Mio – dijo Benjamin colocando su mano en la funda del arma, sacando esta y arrojándola al suelo cerca de Mauricio.
Este ya seguro que su amigo no lo traicionaría guardo el arma y corrió hacia el abrazándolo con fuerza.
- siento haber tenido que dispararte cuando estabas escapando tire a errar -
- lo se amigo – dijo Benjamin contento de que Mauricio siguiera de su lado – gracias –
- le he dicho a Cesar que venia a ver si podía averiguar cuanta gente había en la cabaña, tenia la idea de poder encontrarte –
- es arriesgado – dijo Benjamin
- lo se pero Cesar ha venido aquí a llevarte prisionero a ti y a Romina, a los otros dio la orden de matarlos –
- NO – grito Benjamin y luego se tapo la boca esperando los dos en silencio a ver si alguien había escuchado el grito, cuando nadie apareció continuaron hablando entre ellos.
- quiere vengarse de tu escape junto a Romina con la ayuda de Gonzalo –
- Gonzalo no lo traiciono – dijo Benjamin y Mauricio quedo observándolo fijamente – seguramente dijo eso para ocultar que fue Romina quien lo dejo inconsciente, yo mate a Gonzalo y no me enorgullezco de eso
- eso no importa ahora escúchame he venido aquí a ayudarte –
- es imposible – se lamento Benjamin dejándose caer al suelo – debemos rendirnos –
- No, puedo generar una distracción suficiente como para que escapen todos, ¿hay alguna ventana que no sea la de la puerta principal?
- si en la pared trasera hay otra ventana pero un poco más pequeña -
- esa será su oportunidad – dijo Mauricio – entraran durante la noche, la idea es la siguiente, hare explotar una granada, esto generara el ruido suficiente como para distraer y confundir a todos, aproveche para salir por atrás, es mas fácil así, todos estarán prontos apuntando a la puerta principal, deben escapar y irse, no vuelvan -
- es imposible – dijo el ex soldado analizando lo que acababa de proponer Mauricio
- no, no lo es, no puedes dejar que te atrapen Cesar arrojara toda su ira sobre ti y sobre esa mujer –
Benjamin iba a dar algo contra este argumento pero finalmente reconoció que era verdad, de todas formas estaban todos muertos.
- nueve y cinco arrojare la granada – dijo Mauricio – el ataque esta planeado a las diez -
- de acuerdo - acepto finalmente Benjamin – buena suerte amigo Mio espero volver a vernos –
Mauricio giro en dirección al campamento militar mientras que Benjamin corría en dirección a la cabaña luego de recoger su arma del suelo.
La esperanza había nacido en el corazón del militar, tenia una sola oportunidad, morir o sobrevivir.
Al entrar en la cabaña enseguida los ojos de todos lo miraban ilusionado esperando a ver que tenia para decir.
- tenemos una chance sola – dijo este mirando a todos – debemos aprontarnos todo para las nueve y cinco, en ese momento deberemos escapar dejando la cabaña atrás -
Todos estaban confundidos, nerviosos y asustados al no saber exactamente que es lo que tendrían que hacer, luego que Benjamin explicara toda la idea propuesta por Mauricio todos estaban seguros que su muerte estaba próxima salvo Víctor quien no perdió la fe.
- yo se que es difícil – dijo mirando hacia Romina que estaba mirando al suelo – pero debemos tener fe todos sobrevivimos hasta ahora y podremos hacerlo -
- es verdad – Santiago se levanto – Gabriel te daré una educación y un futuro –
Poco a poco todos se animaron.
El cielo se estaba nublando como de costumbre y cerca de las nueve una pequeña llovizna se avecino sobre el bosque.
La ventana que dijo Benjamin se encontraba tapada por varios objetos y cosas desparramadas sobre la casa motivo por el que Víctor y Santiago estuvieron un par de horas sacando objetos y dejando la pared totalmente despejada, la ventana estaba a tan solo dos metros del suelo por lo que no representaba ninguna dificultad salir por ella.
“nos aprontamos para ver a la muerte” pensó Víctor mientras junto a Santiago corría el sillón de la ventana “pero es lo único que podemos hacer”
- tomen – dijo Benjamin sacando un arma de la mochila y dándosela a Víctor y haciendo lo mismo con todos a excepción de Gabriel.
- será necesario – dijo con angustia en la vos – nadie acá quiere quitar una vida pero es matar o morir -
eran cerca de las nueve cuando todos estaban pronto, el sillón había sido colocado justo debajo de la ventana para usarlo así alcanzaban a esta luego tendrían que correr en distintos lugares en los cuales Irian, Santiago y Gabriel juntos, Benjamin y Romina juntos y Víctor iría con María.
Finalmente todos se aprontaron.
Tenían un punto en común para encontrarse a lo lejos del bosque yendo en dirección contraria a la que había venido había una gran roca que se veía de toda distancia que recibía el nombre de “La roca vieja”
Fue cuando la granada sonó.
Mauricio había cumplido.
Salieron de a uno por la ventana debido a que el espacio era chico y aprovecharon esto para alejarse corriendo por el lado contrario a la puerta principal.
El ruido había sido brusco y estruendoso seguramente todos los soldados se habrían escandalizado con este por lo que nadie los seguiría pensaba Víctor mientras corría alejándose todo lo que podía.
Fue cuando se separaron.
Víctor y María corrieron fijo en línea recta mientras que Santiago con Gabriel doblaron hacia la izquierda y Romina con Benjamin doblaron hacia la derecha, de esta forma confundirían a algún militar si les seguían el paso.

Luego de arrojar la granada que genero la confusión suficiente como para que los otros escaparan Mauricio intento alejarse cuando sintió una patada en las piernas, un golpe en la costilla y como tras arrojarse al piso unas manos lo esposaban.
- lo siento – dijo el hombre a quien Mauricio conocía – no se que ocurrió para que tenga que hacerte esto pero son ordenes de Cesar Diron -
Mauricio asintió y dolorido era transportado por el hombre hacia Cesar.
Cuando llego fue arrojado a los pies de Cesar sangrando por la violencia con la cual había sido tratado.
- Oscar me lo dijo – en Cesar había una total frialdad – me pareció raro que me digieras que querías vigilar la cabaña en especial siendo que TU eras el mejor amigo de Benjamin, desgraciadamente no pudo acercarse lo suficiente para escuchar su conversación pero si que hablaste con el, por lo tanto supe que ME traicionarías, pero no te preocupes, no te voy a matar todavía, por suerte predije esto y envíe cinco hombres que rodearan la cabaña, tus amigos deben estar muertos ya-
Mauricio se lamento llorando mientras Cesar se alejaba caminando hacia la camioneta en la que había llegado y dirigiéndose hacia la dirección en la que todos habían escapado.

Víctor y María corrían mientras Víctor agarraba la mano de su madre así se aseguraba de no perderla, debían estar para la mañana del día siguiente en la Roca vieja pero antes tendrían que alejarse bastante de ella y luego volver para así confundir al enemigo.
Fue cuando un ruido paso silbando cerca suyo.
Un ruido fuerte como si sus vidas hubieran estado a unos segundaos de acabarse, Víctor sintió el disparo de un arma y como la bala le rozaba la cabeza.
el plan había fracasado, estaban atacando.
Atrás suyo sentían como el arma se aprontaba para disparar nuevamente y como unos pasos lo seguían a tan solo unos metros de distancia.

Romina y Benjamin corrían cerca del camino cuando escucharon a una camioneta que se acercaba.
Si seguían por allí los verían o los escucharían.
La Roca vieja estaba cerca pero aun debían confundir a los perseguidores por lo que debían alejarse varios kilómetros para después volver.
Confiando en que la noche los cubriría Benjamin le hizo un gesto de silencio a Romina y corrieron escondiéndose atrás de un tronco de un gran eucalipto.
El sudor recorría ambos rostros mientras escuchaban el motor de la camioneta pasar a tan solo pocos metros suyos pero finalmente el ruido se alejo y se perdió en el gran bosque.

Santiago y Gabriel corrían escuchando ruidos de pasos atrás suyo, todavía nadie había disparado pero el ex mayordomo sabría que lo harían a el no le importaba morir, si no le importaba el niño, tenia que salvarlo, este mientras tanto se dejaba llevar por aquel que consideraba su padre.
Una bala dio contra un árbol cercano, la bala había estado lejos de alcanzarlos pero aun así debían seguir corriendo, esos hombres no tenían piedad y no pararían por nada, dos nuevas balas erraron su objetivo.
- va a estar todo bien – dijo Gabriel intentando calmar a Santiago que corría entre los árboles intentando así desviar a sus enemigos, pero estaban entrenados por lo que en ningún momento perdieron el paso.
Fue entonces cuando un nuevo sonido de bala se escucho, Santiago se estremeció pero continuo corriendo con toda su fuerza, Gabriel hubiera jurado que la bala le había dado en el hombro izquierdo pero este no pudo confirmarlo.
La llovizna comenzó a hacerse mas fuerte y el joven y el niño estaban cansados pero sabían que si paraban dos minutos enseguida morirían.

Víctor y María seguían corriendo pero ya estaban demasiado cansados y ambos tenían una mezcla de cansancio y calor debido a que hacia aproximadamente dos o tres kilómetros que corrían y frío debido a la lluvia que caía como cubos de hielo sobre ellos.
- es una persona sola – dijo Víctor – escóndete, le disparare-
María iba a criticar pero Víctor se alejo hacia atrás con el arma en alto esperando a que los pasos que los perseguían llegaran hacia el.
El hombre quien no esperaba que Víctor hubiera frenado se vio sorprendido al chocarse directamente con el, se apronto para disparar pero Víctor que ya estaba pronto apretó el gatillo disparando al soldado en la pierna y cayendo al piso sangrando y gritando de dolor.
Víctor no se había atrevido a matar a su contrincante, se limito a sacar las balas de su arma y a arrojar esta lejos de el mientras gritaba de dolor y sufrimiento Víctor ignoro estos gritos y continuo corriendo pero esta vez ya no se escuchaban pasos atrás suyo, por unos momentos pensó que para el al menos todo había terminado y seguro con esperanza estaba seguro de que los demás también estarían bien, tenia algo que en verdad necesitaban todos, fe.

Benjamin y Romina seguían quietos detrás del gran árbol escondidos sin atreverse a levantarse, la camioneta se había ido pero el temor seguía allí.
El temor de que muy pronto alguien vendría a atacarlos, pero sabían que tenían que seguir, posiblemente sus huellas quedarían en el barro entonces necesitaban dar vueltas para confundirlos.
Benjamin se levanto primero y comenzó a dar vueltas, caminar en círculos, así podía confundir a algún perseguidor, Romina venció su temor y confío en el, haciendo exactamente lo mismo.
“esto será un milagro de dios si conseguimos seguir vivos a esto” pensaba Benjamin orgulloso del trabajo en equipo que todos estaban haciendo cuando giro para dar los últimos pasos.
- Romina espérame acá – dijo este incluso en la oscuridad distinguió el enfado en el rostro de la mujer
- iré contigo – dijo esta decidida –
- No – negó este rotundamente – escúchame sospecho que en esa camioneta iba Cesar, iré tras ella, debo matarlo, solo así terminaremos con todo esto, espérame aquí y te juro que volveré –
Benjamin y Romina se abrazaron con un fuerte cariño, y un fuerte amor, pero no amor que sienten el hombre y la mujer si no un amor que venia de una gran amistad.
- Benjamin en este tiempo que paso todo lo que paso tu has sido lo único que me ha mantenido bien, si no fuera por ti yo estaría muerta hace mucho, gracias por todo -
- no te preocupes – dijo Benjamin sin dejar de abrazarla – me hiciste ver la realidad, darme cuenta de lo inhumano que actuaba, me hiciste abrir los ojos ante la ceguera en la que permanecía, te juro que volveré para poder seguir siendo los grandes amigos que somos –
Sin decir mas nada Benjamin giro con el arma en la mano pronto para buscar a Cesar Diron y así acabar con todo.

Santiago y Gabriel habían conseguido dejar atrás a sus perseguidores, la llovizna se hacia dada vez mas fuerte y costaba ver con claridad sumando a esto que era plena noche.
Aun así no pararon de correr hasta varios kilómetros de distancia, Gabriel estaba alegre pensando que ya todo había terminado cuando Santiago cayó al suelo.
Lo primero que el niño pensó fue que era debido al cansancio que sentía pero entonces toco algo que no era ni sudor ni lluvia.
SANGRE.
- Santiago estas sangrando – dijo Gabriel – vamos a buscar ayuda – pero el sirviente no respondió si no que cerro los ojos inconsciente.
- AYUDA – comenzó a gritar Gabriel desesperado sabia que si seguían esperando allí solos Santiago moriría, durante varios minutos no se escucho nada, el niño sabia que corría el riesgo que vinieran los soldados pero estaba solo, perdido a mitad de la nada con un hombre que estaba desangrando.

Capitulo XXI
Cuando la muerte llega

L
os pasos de Víctor y María eran cada vez con más agitación.
- he disparado – dijo Víctor con los ojos llenos de lagrimas – me siento como un vulgar criminal -
- no – dijo María mientras corrían – era el o vos aparte fuiste muy valiente, no le quitaste la vida –
- no creo haberlo sido –
- yo si creo que fuiste hijo vamos tenemos que salir de acá para mañana tomar rumbo a la Roca vieja y así encontrarnos con el resto.
Víctor asintió y continuaron alejándose en todas direcciones para así confundir a algún perseguidor silencioso que aun podía estar acechando.
- y si descansamos – propuso María sentándose contra el tronco de un árbol lleno de hojas.
- aquí no cae tanta lluvia – dijo apoyando su cabeza en las rodillas, tenia razón las hojas del árbol tapaban bastante la lluvia pero ya estaban demasiados mojados para fijarse en eso.
Víctor se sentó a su lado apoyando su cabeza en el hombro de esta, si no estuviera tan asustado dormiría tranquilo sabiendo que su madre la cuidaría.
Intentaba no pensar en los demás aunque el rostro de Romina aparecía en su mente apenas cerraba los ojos, tenia el arma en mano por las dudas, debía estar preparado para lo que fuera.

Benjamin caminaba en la oscuridad mojado totalmente, con un arma, su ropa estaba llena de barro al igual que su rostro y se sentía cansado con sed y con hambre pero nada de esto influía ahora.
La camioneta había estacionado aproximadamente a un kilómetro de donde el estaba, tardo unos quince minutos en llegar hacia allá con el arma pronta, distinguió las luces delanteras prendidas y dos soldados a los cuales reconoció pero de simple vista apuntando con el arma en todos lados y allí apoyado sobre la puerta del conductor estaba el.
Cesar quien tenia el arma puntando para todos lados, girando, ese era el objetivo de Benjamin, debía matarlo y terminar con su reino del terror.

Víctor y María continuaban ocultos la copa del árbol, ella temblaba y el miraba para todos lados preparado por si tenia que disparar de nuevo aunque no le gustaba la idea.
Pero debía sobrevivir, por su madre, en unas horas amanecería y cuando eso ocurriera ya todo habría terminado, para bien o para mal.
En ese momento Víctor escucho unos pasos atrás suyo, quiso girar enseguida pronto para disparar cuando una voz dijo:
- no te des vuelta -
María estaba inmóvil sin saber como reaccionar.
Víctor prefirió obedecer a la voz atrás suyo, no por temor a perder su vida si no por temor a que María perdiera la suya.
- les agradezco – dijo la voz – yo advertí a Cesar del plan de su amigo aunque no pude decir con exactitud, sospeche de Mauricio y camine hacia el cuando lo vi hablando con Benjamin, supe que algo harían, encima los guíe a todos hasta acá y ahora asesinare a los que se oponen al gran Cesar, no solo ascenderé si no que seré el gran héroe de la historia Acniana -

Benjamin estaba quieto esperando la oportunidad perfecta para atacar a Cesar.
Entre la lluvia sin final y la oscura noche que ya eran pasadas la media noche el ex soldado aun permanecía oculto en las sombras sin ser visto pero sabia que pronto irían para ahí y lo descubrirían.
Hacia un gran frío y la tormenta parecía no tener final, la Roca vieja ya no se veía, Benjamin sentía como si estuvieran solo ellos cuatro en el bosque.

Oscar tenía a Víctor y a María quienes permanecían inmóviles.
Víctor miro su arma.
“es una sola oportunidad” sabía que si fallaba el tiro todo estaría perdido, su única chance era matar a aquel soldado que los miraba apuntándolo con su arma, pronto atacaría sin dudarlo.
Era el momento.
Víctor giro hacia Oscar y con su arma disparo con las manos temblando de frío y de miedo, Oscar quien esperaba que girase también disparo pero no a Víctor, la bala se dirigió directo a María quien grito de dolor, mientras que la bala de Víctor impacto en la costilla de su objetivo.
Oscar se agarraba el estomago temblando de me dolor, nunca había pensado que Víctor iba a lograr darle.
El soldado colocando sus brazos en torno a las costillas se dio a la fuga dejando atrás a la mujer herida y el joven que la tenia en sus brazos.

Romina sola y con miedo esperaba detrás del árbol la llegada de Benjamin con una sonrisa diciéndole que ya todo había terminado y que Cesar había muerto, pero ya habían transcurrido varios minutos y esto aun no ocurría.
La mujer salto sobresaltada cuando un disparo resonó en el silencioso bosque a excepción del sonido que hacían las gotas al dar contra el pasto, el barro o los árboles ya
Empapados.
Seguido del disparo fue otro continuado por un grito femenino de dolor.
El grito era de…
Romina corrió hacia el lugar del cual había provenido el disparo, al principio lo dudo pero luego supo que tenia que ir y ver si María o Víctor precisaban ayuda.
El temor de que un soldado aun continuara ahí estaba presente pero el miedo de que su hijo estuviera herido fue más grande.
Cuando llego al lugar vio a María con la cabeza apoyada en las piernas de Víctor, su brazo derecho sangraba con dolor y ella lloraba y gritaba sin poder aguantarse.
- cuídala – dijo Víctor a Romina que aunque no lo expreso estaba alegre de saber que estaba bien -
Salio corriendo atrás de Oscar.

Cesar junto a dos soldados vigilaba un área específica.
Poco a pocos los militares se iban alejando del lugar con el arma pronta
Benjamin miro a Cesar de lejos, desde ese lugar podría dispararle y luego alejarse corriendo antes que lograsen atraparlo, luego volver con Romina, pero esto era demasiado difícil y dependía de la suerte más que nada.
Usando la noche como escondite Benjamin apronto su arma hacia Cesar.
Era solo un tiro.
Un tiro y todo habría terminado.
“solo es un tiro y podremos escapar con Romina, podremos cuidar de todos, empezar una nueva vida, un poco de luz dentro de tanta oscuridad”
Entonces apretó el gatillo y la bala salio disparada hacia Cesar.

Víctor corría por todos lados buscando a Oscar quien no lo encontraba por ningún lugar.
Quería matarlo, asesinarlo, hacerlo sufrir, pero poder terminar con el de una vez, era corrompido por el dolor, la ira.
Era plena noche, Víctor freno unos segundos y se quedo en completo silencio a ver si escuchaba a Oscar correr adolorido o escuchaba los pasos apresurados del soldado, pero nada de esto se escucho en el aire.
Víctor continúo su búsqueda desesperado.

Oscar corría adolorido con la mano en la costilla, había dado muchas vueltas para despistar al joven si lo seguía.
“me salvare, sobreviviré y seré un héroe, por fin seré beneficiado, esta pequeña herida no me detendrᔠcada vez le costaba caminar mas pero sabia que si frenaba tarde o temprano lo atraparían, la sangre salía con mas fuerza.
Se estaba muriendo y quería evitarlo, caminaba lo más rápido que podía para llegar al campamento, Cesar lo curaría.
- ah – un dolor insoportable lo agarro, rezaba porque sus enemigos no lo hubieran escuchado, muerto de cansancio reposo sobre un tronco de un árbol todo mojado y sucio pero no le importo.
- pronto despertare y seré un héroe - dijo cerrando los ojos, ya no los volvería a abrir.
- seré… un… her –
Estas fueron las últimas palabras del militar quien murió desangrado.

La bala de Benjamin hubiera dado en el objetivo si Cesar no se hubiera movido ágilmente.
El líder militar ahora estaba mirando a Benjamin directo a los ojos.
Ambos se apuntaban con las armas.
Los dos soldados miraban confundidos esperando ordenes de Cesar, el ultimo en disparar moriría.
- MATENLO A EL – dijo Cesar pero ninguno se movió, la confusión estaba en sus ojos.
- no tienen que hacer esto, estoy aquí para esto, para que vean la otra posibilidad, no es la de matar a un país entero, si no la de unir a ese país y juntos buscar una salvación para la especie humana –
Ambos soldados miraban a Cesar y a Benjamin confundidos.
- LES MIENTE TODOS LE MIENTEN, SOLO ACNIA PUEDE SALVAR SUS VIDAS -
- USTEDES MIENTEN CESAR – grito Benjamin con odio – SE HACEN LOS JUSTICIEROS CUANDO MATAN POR PLACER, CASTIGAN AL INOCENTE Y TORTURAN AL SANTO –
- toda guerra tiene lo bueno y lo malo hay que saber vivir con ello – dijo Cesar sin dejar de apuntar a Benjamin con su arma
Ambos soldados dejaron de apuntar a Benjamin para apuntar directo a Cesar.
- LES MIENTEN MALDITOS TRAIDORES -
Pero ninguno hizo caso.
Cesar disparo a Benjamin pero entre la rabia, el miedo, la lluvia, la oscuridad, el frío el tiro paso a varios centímetros de Benjamin quien sin basilar apretó el gatillo hiriendo a Cesar en el brazo donde sostenía el arma.
Este la dejo caer y cayó al suelo sujetándose el brazo y luego sin compasión alguna Benjamin volvió a disparar pero esta vez en su pierna izquierda.

Víctor volvió corriendo hacia el lugar donde Romina y María estaban.
María aun sangraba pero Romina había roto parte del buzo que tenia puesto y con el había atado la herida de la mujer.
- precisaremos ayuda – le explico a Víctor apenas llego – si no corremos el riesgo que pierda su brazo -
Este asintió con la cabeza y comenzó a ver hacia los árboles a lo lejos como la lluvia no se detenía y como todo había salido peor de lo esperado pero había algo que importaban, estaban juntos.

Capitulo XXII
La noche eterna llega a su final


C
esar cayo al piso gritando de dolor y sangrando en gran cantidad, uno de los soldados le coloco esposas en sus manos mientras este gritaba y luego giro hacia Benjamin.
- mi nombre es Raúl – explico uno de los soldados – y este es Néstor te lo digo porque a pesar que convivimos varios meses nunca tuvimos la oportunidad de hablar, admiramos tu valor al liberar a esa mujer y escapar -
- es sabido que todos quieren hacer lo mismo – prosiguió Néstor – por eso decidimos ayudarte, queremos viajar contigo y intentar acabar con esta guerra inútil –
- estoy sorprendido yo no se… que decir –
- sos un líder Benjamin – dijo Raúl - por favor déjanos ayudarte, nos comunicaremos con el campamento, la mayoría continúan allí, explicaremos lo que paso y luego diremos donde estamos –
- se que nadie nos entregara – comento Benjamin – esta bien, yo iré por Romina mientras quiero que ustedes quédense aquí vigilando a Cesar –
Estos asintieron con la cabeza y Benjamin comenzó a correr hacia el bosque con toda su fuerza, estaba preocupado por su amiga.
- ROMINA – grito el ex soldado cuando llego hacia el árbol donde esta tendría que estar y no la vio allí.
- ROMINA – volvió a gritar con fuerza guardo silencio varios minutos pero nadie respondió, continuo caminando durante varios minutos entonces vio una figura contra un árbol recostada, se acerco lentamente a ella y cuando lo vio cara a cara comprobó que era uno de los militares muertos.
- yo te recuerdo – dijo Benjamin para si mismo – vos estabas en la reserva aquel día, así que tu me seguiste –
Entonce escucho un sonido atrás suyo, alguien se acercaba.
Entre las sombras salio Víctor con el rostro embarrado, al ver y reconocer a Oscar se arrodillo en el suelo.
- tuve que hacerlo – dijo este a Benjamin – mi madre esta herida, ayúdame a llevar a María a un lugar donde la curen-
Benjamin asintió y dejaron el cadáver de Oscar abandonado en aquel árbol.
Ambos corrieron hacia el lugar donde se encontraban Romina y María.
Apenas las miradas de Romina y de Benjamin se cruzaron se abrazaron con gran felicidad.
- entonces vos mata… - comenzó a decir Romina pero Benjamin puso su mano en la boca de esta para callarla.
- no… solo me asegure que no moleste más –
Romina asintió en señal que había comprendido.
- no podemos llevarla a un hospital – se lamento Víctor – tampoco al campamento -
- hay dos soldados allí cerca de una camioneta, en las camionetas siempre hay elementos de primeros auxilios podremos intentarlo –
- es lo único que podemos hacer – dijo Víctor y cargo a María que estaba inconsciente en sus brazos y comenzó a correr hacia la camioneta.
Primero todos se sobresaltaron al ver a Néstor y Raúl que estaban allí pero al ver que Benjamin fue directo a ellos se calmaron.
- me he comunicado – dijo Néstor – la noticia que va a salir públicamente es que en la cabaña estaban preparados para el ataque y lograron matar a varios de nuestros hombres antes de poder vencerlos, Mauricio se encuentra entre los muertos al igual que nosotros y que tu, nadie sobrevivió en la cabaña, liberaran a Mauricio ahora mismo, les dije que mañana esperaríamos al medio día al que quisiera unirse a nosotros, los demás partirán a la tarde y olvidaran todo, la cabaña ardió en llamas así que nadie vendrá para acá nunca mas -
Benjamin asintió con la cabeza, todo había terminado.
Cesar continuaba esposado con el brazo lleno de sangre y la herida abierta y totalmente infectada, la herida de la pierna estaba aun peor, como estaba en esas condiciones Cesar no sobreviviría, pero nadie se preocupo en curarlo, todas las miradas estaban fijas en la herida de María.
Afortunadamente Néstor como la mayoría de los militares que se encontraban allí tenia conocimientos médicos por lo que el pudo intentar curar a María, momentos en los que Víctor apenas respiraba.
A pesar que con las horas la lluvia continuaba cayendo cada vez lo hacia con menos fuerza.
Todos se transportaron a la cabaña, allí Néstor que tenía grandes conocimientos de medicina intentaría ayudar a María, en el ejército Acniano a uno de cada cinco soldados era seleccionado para estudiar medicina y así en caso de emergencia poder realizar las curaciones básicas.
Debido a esto Néstor intentaba curar a María.
La noche y la lluvia por fin desaparecieron dejando adelante una total ola de humedad y un cielo totalmente nublado.
Víctor y Romina se quedaron afuera esperando preferían no ver, hasta aproximadamente las 9 de la mañana que fue cuando salio Néstor quien reflejaba el cansancio en sus ojos.
- esta bien, se quedo dormida, que NO mueva el brazo – explico Néstor
- ¿te quedaras para controlarla? – pregunto Víctor
- hare lo que diga Benjamin el es mi líder –
Víctor asintió con la cabeza.
Aproximadamente por el medio día Víctor y Romina fueron a La Roca vieja a buscar a Santiago y a Gabriel.
Los demás a excepción de María quien dormía se quedaron esperando la llegada de los militares que se les unirían.
Ese día fue la primera muestra de unión contra la guerra.
Ocho soldados mas de los treinta que habían venido con Cesar abandonaron el ejercito Acniano para unirse a Benjamin.
- todos fuimos dados por muerto según el informe que presentaran los que aun pertenecen al ejercito – explico uno de ellos – no ha sido una decisión fácil, hay muchos casos de personas que se unirían pero tienen familia y muchas cosas que abandonar -
- no es que yo no las tenga – dijo Benjamin – es que alguien tenia que hacer esto –
Mauricio apareció entre todos y abrazo a su amigo con fuerza, parecía que por fin todos los probemos estaban terminando.
- trajimos una buena reserva de agua – explico otro soldado – por un mes tendremos -
Benjamin asintió complacido.

Romina y Víctor estuvieron varias horas esperando a que Santiago y Gabriel se quedaran, la hora estipulada había sido entre el medio día y la una de la tarde peor por mas que las horas pasaron ninguno de los dos apareció.
Víctor se quedo allí esperando mientras que Romina volvió a la cabaña para averiguar si había llegad algún informe de que hubieran capturado a un niño y a un hombre o algo peor a la captura…
Cuando Romina llego ninguno supo con exactitud decirle que había ocurrido, cuando se comunicaron con el campamento, uno de los soldados confeso haberlos seguido pero que les había perdido el rastro.
Romina volvió junto a su hijo para informarle de esto y este asintió con la cabeza.
- me quedare esperándolos – dijo – al menos pasare la noche aquí si mañana no han vuelto regresare y veremos que hacer –
Así Víctor pasó la noche durmiendo sobre la roca vieja esperando la llegada de Santiago y Gabriel rezando que ambos estuvieran bien.
Así transcurrió la noche, ya habían pasado 22 horas desde la hora establecida para el encuentro pero ninguno de los dos regresos, Víctor supo que no lo harían.
Cuando regreso con los ojos llenos de lágrimas no hizo falta que digiera nada, nadie dijo nada, no podía saberse con exactitud que había ocurrido pero sabía que si no habían vuelto por algo era.
Benjamin intento cambiar el tema.
- hemos roto todos los celulares y toda la forma que pudieran tener de comunicarse con nosotros cualquier persona que lo intente -
- ¿donde Irán? – pregunto Víctor sin levantar la mirada
- iremos a la frontera de Acnia y Seida con el objetivo de poder entrar al país y así ir por nuestras familias, seres queridos y pertenencias de valor –
Víctor asintió con la cabeza, contra uno de los árboles vio un gran bulto que estaba tapado con una manta y lo señalo con temor.
- son los cuerpos de Oscar y de Cesar - explico uno de los soldados
- ¿Cesar murió? – pregunto sorprendido Víctor
- si… estaba totalmente herido y no paraba desangrar, cuando despertamos estaba muerto –
- tu madre ha despertado – dijo alegre Néstor – creo que se encuentra bien puedes ir a verla –
Un poco de esperanza se vio en el rostro de Víctor y corrió hacia la cabaña.
A pesar de tener que informar de la mala noticia deseaba hablar con ella.
Benjamin lo observo dirigirse a la cabaña y se acerco a Romina:
- ¿Cuándo le dirás que vienes con nosotros? En dos horas abandonamos el lugar -
- apenas termine de hablar con ella – explico Romina quien aun continuaba demasiado deprimida por el tema de Santiago y Gabriel como para pensar en ello.
Benjamin asintió con la cabeza.
Víctor abrazo a su madre con fuerza.
- estoy bien – dijo esta complacida – la bala no se introdujo demasiado, tendré que se fuerte pero tengo un hijo que se que estará a mi lado -
- si madre – dijo Víctor emocionado – nunca más nos separaremos –
- cuéntame todo – pidió esta – ¿están todos bien? –
En ese momento Víctor comenzó a relatar todo lo que sabia de la noche trágica, relato lo que le había contado Benjamin de cómo los soldados que iban con Cesar lo habían abandonado y de cómo había muerto desangrado.
Desgraciadamente el momento que Víctor temía llego cuando su madre pregunto por el mayordomo y el niño, cuando Víctor explico lo ocurrido, esta al igual que todos pensó lo peor y comenzó a llorar, en ese momento le pidió a Víctor que la dejara sola y este dejo la cabaña escuchando el llanto de su madre.

Capitulo XXIII
Un futuro incierto

R
omina y Víctor caminaban solos por el bosque, ella le iba a dar a el la noticia de que se iría junto a Benjamin a la frontera con Acnia.
Este ya lo sospechaba desde un principio pero prefirió dejar a que hablara ella.
- hijo – comenzó esta lentamente – yo no se como decir esto -
- solo dilo – dijo este esperando a que ella continuara
- me voy con Benjamin a la frontera y a intentar entrar en Acnia, quiero ayudarlo el me necesita y yo a el, pero no como hombre ni como amante si no como amigo, el me ha devuelto a la vida y yo debo hacer algo por el –
- Romina yo se que nunca he sido el hijo perfecto – dijo este – y he cometido muchos errores –
- no digas nada – pidió esta – dame el abrazo que tanto espero –
Ambos se abrazaron con un enorme cariño, sabían que ya no volverían a verse luego de ese día, pero Aun así se querrían siempre.
Cuando volvieron Néstor le estaba dando las últimas indicaciones a María de cómo cuidarse y entre tres soldados habían enterrado los cuerpos de Oscar y de Cesar, el soldado al cual Víctor disparo en la pierna había sido llevado al campamento.
Usando la camioneta poco a poco los soldados se fueron subiendo haciendo un gesto de despedida a Víctor y al resto.
Romina le dio un beso a María y con un fuerte abrazo a su hijo se subió a la camioneta.
Benjamin se acerco a María y la abrazo con fuerza.
- lamento lo de Santiago y Gabriel pero no hay evidencia de su muerte, es mejor pensar que algún motivo los retraso y que ahora están muy lejos de aquí viviendo la vida solos y felices –
Luego se acerco a Víctor y le estrecho la mano.
- cuida a Romina – le pidió este – es una persona muy importante para mí -
- lo hare – dijo este con lagrimas en los ojos, luego lo abrazo y subió a la camioneta. María y Víctor se quedó observándolos alejarse hasta que finalmente se perdieron de vista.

Apenas abrió los ojos Santiago sintió varios gritos de victoria y de alegría y observo decenas de rostros que lo miraban emocionados, entre ellos distinguió a Gabriel y se alegro de que estuviera sano y salvo.
- ¿Qué paso? -
Entonces recordó, la bala del soldado impactando en su hombro y como el había continuado corriendo para asegurarse que no pudieran atrapar a Gabriel. --cálmate – dijo un hombre de vos ronca – por ahora descanse ya abra tiempo de hablar –
Santiago asintió con la cabeza, no sabia donde estaba pero sabía que eran amigos.
Así paso otro día.
Santiago despertó y recibió una buena sopa caliente y uno de los hombres que el supuso que era el líder de aquel lugar (todos le consultaban cosas) se sentó en la cama a su lado.
- mi nombre es Esteban – explico este cuando se sentó a los pies de la cama – te presento al mayor refugio de toda Seida, nos encontramos a varios kilómetros de donde fuiste herido, gracias a dios uno de los nuestros estaba por esa zona porque corría el lugar que hay gente viviendo allí y queríamos revisar que no fueran soldados Acnianos cuando te encontraron, mas o menos el niño explico lo ocurrido y te trajimos aquí, te curamos y ya no tendrás que preocuparte, estamos muy bien camuflados -
- pero – dijo confundido Santiago - ¿Cómo hacen para abastecerse del agua suficiente para sobrevivir? –
- tenemos un pacto con algunos militares corruptos de Acnia, pagamos el agua, podría decirse que es una especie de contrabando –
- es maravilloso – dijo Santiago sorprendido
- lo es ¿verdad? – Dijo Esteban dejando entrever un gran orgullo en su tono de vos – el niño será educado, se le revisara que no tenga ningún virus –
- ¿Cómo lograron todo esto? – pregunto Santiago
- nos preparamos – explico Esteban – todo este lugar esta totalmente escondido a los ojos de los otros, las salidas están bloqueadas, hojas, ramas, rocas, todo es totalmente confundible con el resto del paisaje, en una o dos ocasiones han intentando entrar intrusos pero hemos conseguido detenerlos -
- yo… maravilloso, podré traer a María, Víctor, Romina y Benjamin podremos todos vivir acá –
- lo lamento – dijo Esteban – no hay espacio para mas personas a lo sumo uno mas, estamos súper poblados, para el poco espacio que somos vivimos unos 300 sobrevivientes-
Santiago guardo silencio durante varios minutos.
- entonces debo decir que no me quedo, lo lamento Esteban les agradezco de todo corazón lo que han hecho pero mi gente me espera, por otro lado me gustaría que Gabriel se quedara aquí -
- entiendo y respeto tu decisión – dijo Esteban – cuidare al niño como si fuera mi hijo, comerás algo y después un escolta te acompañara a la salida, adiós Santiago y que la suerte este de tu parte-
Santiago hizo un gesto con la cabeza que dejaba entrever un gran respeto.
El mayordomo comió y luego de levantarse, darse un buen baño salio en busca de Gabriel.
El niño y el mayordomo se abrazaron con fuerza.
- hijo – dijo Santiago, lo que iba a decir ahora le iba a doler como no lo había hecho ninguna cosa hasta el momento – debo irme, volver con María y con Víctor que me están esperando, tu quédate aquí, te darán una vida, educación, estarás bien alimentado, tendrás el agua que quieras -
- ¿me estas diciendo que te vas? – pregunto sorprendido Gabriel al que están palabras le habían dolido como pocas
Santiago asintió.
- QUIERO IR CONTIGO -
- no, todos estarán más felices sabiendo que te deje a salvo –
- esta bien VETE – grito Gabriel y se alejo corriendo sin darle oportunidad a Santiago de hablar.
- estará bien – dijo Esteban – con el tiempo aprenderá –
- se que si, cuídalo y que sea feliz –
Esteban le entrego un poco de alimento y algo para beber durante el largo trayecto hasta que regresara a la cabaña.
Santiago se quedo esperando a ver si Gabriel venia junto a el pero el niño no apareció por lo que escoltado por un hombre mandado por Esteban abandono el refugio.
Mientras se alejaba del refugio y caminaba rumbo a la cabaña Santiago estaba deprimido debido a lo que había ocurrido con Gabriel pero sabía que tenía que ser fuerte.
Estaba sumergido en sus pensamientos cuando escucho unos pasos detrás de él.
Enseguida giro asustado pensando que podía ser un soldado Acniano y vio al niño mirándolo.
- vamos a casa – dijo este – no podía quedarme allí, María y los demás nos esperan -
Santiago no dijo nada, emocionado agarro la mano del niño, sabia que lo mejor era quedarse en el refugio pero el lo necesitaba a su lado.

Había transcurrido ya una semana desde todos los acontecimientos.
Víctor y María estaban conversando afuera sobre todo lo ocurrido.
Cuando esta quiso levantar unas cosas del suelo.
El brazo de María estaba enyesado y apenas podía moverlo.
- no tienes que hacer todo por mi – dijo María mirando fijamente a su hijo cuando este le saco las cosas de su mano y comenzó a hacer el levantamiento el
- por favor madre – dijo este – déjame ayudarte –
- HIJO, tengo una mano enyesada no estoy sin piernas –
- si si – dijo este y continuo
Hacia mucho tiempo que ambos no se sentían viviendo felices y tranquilos por lo que la convivencia era sencilla, sabían que pronto se acabaría el agua y tendrían que ir a buscar mas, pero estaban seguros que ya no pasaría nada mas que les hiciera daño –
- alguien viene – dijo Víctor que escucho los pasos de alguien detrás del árbol.
El rostro de el y el de María reflejaron miedo, ¿quien venia y que quería? Víctor quiso ir a buscar el arma pero no le daba el tiempo, entonces la persona salio de entre los árboles, pero no era uno… si no dos y uno de ellos era un niño.
- MAMA MIRA SON -
Víctor corrió emocionado a abrazar a Santiago y a Gabriel al igual que María.
Luego que dejaran todo los cuatro se quedaron conversando largo rato sobre todos los acontecimientos que habían ocurrido y sobre todo lo malo y lo bueno que había pasado en ese ultimo mes.

Epilogo

T
oda esta cadena de acontecimientos que ocurrieron en esta historia fue algo transcendental en lo que fue el futuro de la raza humana.
Benjamin y su pelotón, fueron directo a la frontera, luego de que lograron entrar en Acnia se unieron a algunos de los movimientos anti guerra donde prepararon un gran ataque contra la prisión donde eran llevados los detenidos que estaban en contra de los ideales de Damian Tor presidente de Acnia.
El ataque resulto un gran éxito, los guardias no estaban preparados y muchos prisioneros fueron liberados entre los que se encontraban la familia de Benjamin entre otras personas, la noticia de este ataque fue esparciéndose por todo el continente, poco a poco al correr de tres meses Este movimiento fue ocurriendo en todas las cárceles de no solo Acnia y Seida si no del resto de los pequeños países de la isla, algunos de estos fueron dirigidos por Benjamin, pero otros no.
Los revolucionarios eran cada vez más y varias personas pronto dejaron el ejército para unirse a la lucha, el nombre de Benjamin entre otros importantes como Mauricio o Néstor comenzaron a sonar en toda la isla y empezaron a ser conocidos como los grandes salvadores.
La primera ciudad en ser liberada completamente fue La paz, luego poco a poco países como Torian o Dakota lograron su independencia.
Cuando la guerra finalizo varios militares fueron a buscar a Damian Tor y así detenerlo, pero fueron por el había escapado de la casa del gobierno Acniana.
Finalmente luego de tres meses Damian Tor fue encontrado en una fábrica abandonada, se había suicidado intoxicándose.
Así con las ciudades libres, y el país sin gobierno, el ejercito dirigido por Benjamin fue elegido para tener una reunión donde nombrarían a un gobernador temporal mientras la situación se re establecía.
Entonces cuando un hombre llamado Rodrigo fue elegido como gobernador, la gran idea de Jonathan Borks salio a la luz, a partir de ahora no se hablarían mas de Acnia, Seida, Torian o cualquier otro de los países, si no que ahora todos serian un salo país el cual recibió el nombre de la gloriosa isla en la que se encontraba Libertad.
Las ciudades se disolvieron y toda la población de la isla se transporto a un solo territorio donde vivirían hasta el final de los días de la especie humana, el agua era dividida y un bien muy cuidado.
Así finalizo esta historia, una historia de amor, odio, traición, guerra y armonía.
Toda la historia que tuvo como protagonistas a Víctor, María, Romina, Benjamin, Santiago y Gabriel con la ayuda de otros personajes fue fundamental para cambiar modificar las ideas de Benjamin y gracias a eso poder salvar lo que fue considerado como la tercera guerra mundial y la última.
Ahora la isla viviría como lo dice su nombre en completa Libertad.