He perdido mi sombra, no sé como ni cuando, creo que fue durante un sueño.La busco desesperado,estoy desnudo sin ella.Miro en el sombrerete de la chimenea,su escondite preferido,pero ni rastro de ella.Voy hasta la playa y miro una a una las sombrillas donde se suelen refugiar las sombras revoltosas pero no doy con ella.Me dirijo a la tienda de sombreros, otro de sus refugios en los días de lluvia y no la encuentro.Compro un mbsorero de ala ancha con el que llenar el hueco que ha dejado.
Por la noche vago por el paseo bajo las farolas,quizà se haya refugiado en alguna de ellas.Veo sombras de gatos burlones,de borrachos que ignoran haberla perdido.Descanso bajo un sombrajo donde veo un baile de sombras chinescas.Las farolas se comen la oscuridad y la luz de las estrellas pero crean unas sombras meravillosas.
Vulevo a casa sombrío y desencantado,pienso que tal vez pueda verla mientras duermo.Y si,la veo,está con Fernando Alonso,corriendo a trescientos por hora,La llamo y lllega hasta mi, acelerada,a todo gas,creando en mi cuerpo un fuerte balanceo.Me dice que necesitaba un poco de emoción,que conmigo se aburre.
La entiendo, soy un hombre tranquilo.Pero no va a pasar más,Me he comprado un vale para el parque de atracciones,nos montamos en la montaña rusa, entramos en el tunél del terror y nos damos unas vueltas en los cars.Todo con tal de tenerla contenta.