Corazón, si se muriera la metáfora ¿Dondé vivirían tus labios y tu adormilado vientre? La escala con que mido tu cuerpo, los besos ¿A dónde se irían? Como te abrazaría; de veras lo haría ¿Que le pasaría a la cascada de tu pelo y a tu asustada risa?

Corazón si la metáfora desistiera de vivir y se quedara dormida ¿Tendríamos que decir adios a las sembradas sombrillas de los parques? ¿Que le pasaría a la casa de tu perfume y tus gritonas cosquillas?

Corazón, si se suicida la metáfora no habría lugar en tu pelo que me diera cabida. Si se muere, que no se muera, hay eternidad para amarnos todavía.

Corazón si se mueriera ella, nos mataría el silencio, se nos caería el oído. Te he tejido un suspiro para que te lo pongas en las fiestas de gala ¿ese también se rompería?

Estamos de fiesta porque ella vive; porque el día que muera; se moriran nuestros abrazos de luna llena. Se morira tus piernas y las rodillas, estamos hechos de polvo ¿Qué es el polvo? Metáfora de la vida.