Hola mujer hermosa
tu paso de espuma
agradezco ahora.
Tu sueño de reina,
de diosa que ofreces.
Amiga de los silencios,
del llano, del mar,
del hambriento.
Señora de las flores,
sultana de corazones.
Deja tu pluma cantar
para que brillen la hojas,
como hermosas mariposas,
dispuestas siempre a volar,
entre flores primorosas.
Jazmines, rosas, claveles,
un suéter de luna invernal,
zapatillas y brazalete,
rondando siempre tu almohada.
Tu sonrisa azorada,
tu alma que despacito
sale a tocar el pianito,
para hacer feliz a la abuela,
al niño que está dormido
soñando con ese amigo
que mañana a de jugar.
Hada de mil naciones
con tu paso vaporoso,
tu corazón silencioso,
rumbo al confín del lucero
juntando amor y brasero,
cruza el rio tormentoso,
da abrigo al menesteroso,
mujer siempre madre ,
antes, después, mujer.
MARÍA DEL ROSARIO ALESSANDRINI. |