EL Saltito-el Brinquito( Capítulo I )

Ayer, te decía, que no puedo, que no puedo...Caminar.
Tu me animabas y me decías, poco a poco, poquito a poquito.
Un esfuerzo más.
Gracias, por animarme, pero no me insistas, que no puedo.

¿No sales, entonces de casa? .A poder ser, por las mañanas.
Miro , en el Diccionario, la diferencia,
entre andar, saltar, y brincar…
Lo mío, ninguna de las tres cosas es.

No es salto,ni es brinco.
Es a lo sumo, en diminutivo, un brinquito, o un saltito.
Como lo quieras llamar, tú ya me entiendes.
Vuelvo al Diccionario. Y en diminutivo, ¿sabes? … No viene.

Vino a mi recuerdo aquel canto.
¡Brincan y bailan, los peces en el agua,
brincan y bailan ,los peces en el río!.

Ni siquiera eso! qué vamos hacer!.
Lo mío es el, saltito , el brinquito.
Yo en la tierra, y ellos en el agua, en el río y en las charcas.
No es poco , coincidir, en algo.

El salto de la rana, me encanta, verlo.
El correr del pez, se me escapa.
Te hablo, con propiedad.
porque me encantaba ,todo lo que sea agua,
he ido, a peces y ranas muchas veces,
y no es tan fácil cogerlos, con la mano o con la caña.
Haciendo (trampas a los dos ,con red,) se cogen y no se escapan.
Pero, ésto no es honrado.
Lo nuestro es, que el hombre, se defienda, en tierra.
La rana , y el pez en el agua.

No soy, ranita ni pececito,
Pero me parezco mucho, en andar de sitio en sitio.
En el campo, en la calle y en el río.
Las potencias del alma, y del cuerpo.
con admirable puntualidad, y lealtad,
se desarrollan, como nunca lo hacían.
Memoria, impresionante .Raciocinio, ni te cuento,
ganas de trabajar, como siempre.
De comer, y demás,¿hacemos una apuesta.?
Dí, que no, la perderías y luego, para qué no mas.

Son los remos de abajo, las piernas, las que no pueden remar.
Los de arriba, los brazos, será por envidia,
van notando algo, que el remar ,no era el de antes.
han perdido el ritmo , los de arriba, con los de abajo.

Y al moverte, por tierra, vas perdiendo el equilibrio,
de tu cuerpo y de tu alma.
El caminar no es el mismo, es más lento. Que se cae…que si, que no,
(cada vez que lo veo,) voy comprendiendo, aunque tarde, su situación.
El brinquito, el saltito, siempre tiene que ser ayudado, por el bastón.

Ésto hace, que cuando te ven, a unos le da la risa,a otros compasión.
Pues ni lo uno ni lo otro.Reírse del mal ajeno ,aunque te haga gracia,
no es bueno, es muy malo, muy malo…yo diría perverso.
Si me apuras, peor que el veneno, que mata y contamina.

Lo mas importante en éstos momentos, aunque tarde,
es ayudarle, quererle, acompañarle, como el bastón, hace desde hace años.
Le acompaña, le habla, sostiene, su cuerpo y su alma.
No lo puede dejar, si lo deja, se cae.

Para Julián, el bastón, es lo mas importante.
¿Puedes, ser tú, hombre, alguna vez, bastón humano
que ayude, que calle, que sostenga,como un hermano, amigo, o compañero?.

El saltito, o el brinquito. Con éllo, Julián, se conforma.
Ver y estar un rato en la calle. Allí ,ve: personas, niños, jóvenes,
mayores, hombres y mujeres, padres y madres.
Allí respira el aire limpio, oye el silencio del rio .
Ve el salir del sol, por la mañana ,y ponerse por las tardes.
Ve la luna, que se asoma, y se queda toda la noche.
Las estrellas, que unas salen, otras entran, todas se mueven, son tantas… Ver ése movimiento, a mi me distrae.
Corren unas, otras vuelan…Otras me animan, porque parece,
que brincan y bailan en el aire, con la luz de la tierra, ésta tierra mía.

Si le acompañas, ten en cuenta algunas cosas:
El va dando brincos, dando saltos…hasta que sentarse pueda.

Me siento,me recojo, mis fuerzas, no dan mas, no aguantan.
Si le acompañas, como el bastón.
Háblale, y házle hablar de cosas bonitas…
Háblale de cielos, de amores, de flores. Procura no hablarle de problemas.

Háblale de todo aquello, que nos haga reír, olvidar.
Háblale, de recuerdos de niños, con globos, de pirulís, de barquillos.
De polos de nata, leche, y de fresa,
que en el( Corrillo ),vendía un señor con blusón, que se llamaba Cesar,
que al ver llegar a los niños, siempre sonreía,
nos miraba, y preguntaba…¿de qué es…?de nata, de leche o de fresa?.

Háblale de la Escuela, de peonzas, de los juegos, que recuerdes,
las bolas, el tírable , al ojo y al guá, a guardias y ladrones, ¿se te olvida, alguno más?
De mayores: la calva, el mazo, la rana, la raya. Los de mesa, nosotros no los conocíamos.
Eran los bares, donde ése oficio, esá afición, se ejercía.

Háblale de ojos bonitos, de niños, de madres, de ancianos, de abuelos.
Háblale del caminar, del caminar de los hombres.
del correr de la fauna…la del ciervo, la del gamo,
del salto de la liebre y del conejo,
del salto, del gato y el ratón,
del salto, sobre todo de la rana.

Del brincar de los peces,y su bailar, en el agua,
en los ríos, en las charcas, en la mar, donde haya un poco de agua.
Háblame de la nieve, del riachuelo, de la cascada,
del manantial, de la fuente, del arroyo, del regato.
En todos hay alegría, porque el agua,es tan esencial,
que no podemos, prescindir de élla, en la vida.

Háblale de vuelos,de mariposas, del alcaraván,
del cantar de las alondras, codornices y palomas,
del canto del ruiseñor, del , canario, y del jilguero,
de gaviotas, volando de barco, en barco,
saludando por todas las partes el nuevo día.

Háblale de la pesca en el río, en la mar, y en la charca.
En los ríos, son los barbos, los lucios, la trucha.
El alburno, el blas blas, el hucho hucho.
La sarda pequeña junto con el renacuajo. En la orilla, el cocodrilo,
Y he sido testigo de ello, atentos a la presa,
Lo que caiga en sus fauces no se libra, no lo cuenta.
El cangrejo crustáceo, en el río. Verdinegro, feo con gruesas pinzas,
se arrastra por el suelo, tapado por el agua y escondido entre espadañas hace difícil el cogerlos, bien con lamparillas o con reteles, preparados para ello. Al verlos da asco y lo que comen una porquería.
Cocidos con agua hirviendo, el verdinegro,
se vuelve poco a poco rojo carbón.
Carbón de quemar. Carbón de fragua, carbón de brezo.
Este es el cangrejo español. Del americano mejor no hablar.
El español, alineados con cebolla, ajo pimiento y un poquito de sal, es el manjar más soñado que puedes pensar.

Julián López Santolino
( Continuara la 2ª y ultima parte)