Population Override

Se crea un universo. Se inserta en este universo materia y energía. Se crea la intención de vida. Todo es. El universo es basto e imperecedero.
La vida continúa un flujo único y continuo. Nada se destruye pues la intención sigue en inercia. Todo se transforma.
Todo se deja intacto y la vida continúa su ciclo. El equilibrio permanece constante bajo el cambio universal. El equilibrio implica armonía trascendental, pues nada es incorrupto más la naturaleza está intrínseca en todos los seres.
En algún momento surge una contraimplicancia. Se desconoce en que momento se corrompe la continuidad, y si pertenece al dominio de lo natural.
Etimológicamente es incongruente dar definiciones. No existe contemplación alguna ante dicho suceso, de haberse dado, y se desconoce su proceder.

Se ha dado una fuerza excluída del campo físico; se introduce el concepto de pensamiento.
Dicha fuerza da orígen a nuevas formas de vida de naturaleza patógena. La armonía se corrompe, el motivo cambia de forma, el movimiento encuentra su cause alterado.
Los nuevos entes se multiplican y absorven la intención manifestada. El movimiento encuentra su freno, decrece lo que se preveía imperecedero.
Los entes se destruyen entre sí, al mismo tiempo que aumentan en población. La nueva fuerza cambia su intensidad y rango de aplicación. Las dimensiones son alteradas.
Esta fuerza pierde su propia fuente, altera su cauce de control. No se encuentra intrínseca en las manifestaciones primogénitas. Se destruye el equilibrio universal.
La manifestación de vida encuentra forma de autosustentarse independientemente de su prima forma. Se desprende del motivo.
La fuerza se tuerce indefinidamente. Energía y materia son sometidos. El universo es corrompido. El ente se esparce reactivamente, colisionando.
Se destruye un universo.