En ciertas ocasiones, 
maldigo lo que puede ser una escalera. 
Y me duelen harto los pies. Porque camino... 
NO me quejo, sólo me duele,  
...las rodillas. 
 
DE vez en cuando el  bulto rojo,  
me remota a mi propia amargura. 
NO me quejo, sólo me duelen,  
.....los ojos. 
Y aparto el corazón. 
 
En ocasiones, cuando Roberta 
revierte la memoria, o su esposo, sin dormir 
diseña su silencio.... 
MI melancolia y su gravidez de hombre anciano 
se distancian. 
 
En muchas ocasiones, 
cuando mamá conversa,  
o la gata rosa duerme 
o mi hermana hace el amor en una casa alejada 
buscando calor, me repito lenta,  
seca,  
bebiendo agua: que el mundo gira 
masticando cada suspiro. 
Y me digo, puta madre,  
y estoy bebiendo agua, y caminando. 
felizmente.  |