Nunca he creído ni he apoyado esa imbecilidad que dice que aquí todos somos iguales. Cada cuál es un ser por sí mismo y en cada quien hay un mundo diferente al de al lado. Somos entes especiales, cada quien tiene algo distintivo, como una escencia individual imborrable y a la vez imperceptible. Hay gente que consige encontrar su propia esencia, como ese olorcito que nos marca, y sin embargo, hay quienes pasan por la vida sin siquiera notar su existencia.

Yo te considero una persona especial hermana, creo que he logrado entrar en tí, quizás encontrarte. Siempre he luchado por conocerte, por ser mas parte de tí que nadie. Quisiera abrazarte y sentir lo que sientes, y llorar contigo, poder entender todo lo que pasa por tu cabeza.

A veces te miro y me desespero, quiero ayudarte pero no consigo mas que comprenderte, y sé que eso no te sirve de nada...

Cada día me siento mas parte tuya, creo que he entrado en tu corazón, tal como tu aquí en el mio. Estás tan clavada en mi que cuando te tengo cerca creo comenzar a pensar y sentir como tú.

Hay tanto en tí que nadie conoce. Nadie se detiene a observarte, nadie llora tus penas ni celebra tus alegrías. Tantos sueños frustrados hermana, tanta rabia acumulada, quisiera darte alivio y no encuentro cómo. Solo puedo decirte que te amo más que a mi vida, y que siempre estare aquí, se que lo sabes....y cuando tengas pena y te sientas mal, acuerdate de la cara de tus niños, al Lukitas lleno de chocolate, las manitos de la Nany, los ojitos brillantes del Julio. No hay más motivo para vivir que ellos hermanita, y si necesitas fuerza...sácala de ellos, que son los únicos que siempre estarán ahi incondicionalmente para ti.