La verdad que vuestros abrazos y expresiones de cariño han llegado a buen puerto. He trabajado con otro ánimo estos días, me enseñaron que siempre los humanos precisaremos la calidez de nuestros semejantes, más allá de circunstancias y realidades.
Solamente una respuesta, unas palabras cariñosas, han despertado en mí cosas que estaban muy escondidas, muy dentro, pero que me hacen sentir vivo.
Quizás alguien pueda necesitar mi abrazo, pensé, e inmediatamente me abrigó un extraño sentimiento, me dije ¡hasta yo puedo ser útil para alguien¡.
Insisto, a mis hermosos transeúntes de mi rincón libre, disfruten de la libertad de poder amar, de tener una piel cerca, de caminar bajo el sol, de expresarse, de la vida.
No solo te priva de todo esto, el estar tras las rejas, uno mismo a veces se impone prioridades, que tarde o temprano, no lucen indispensables.
Los quiero, les mando un abrazo del alma, y vivan la vida¡¡¡ |