Regálame una sonrisa de orquídea
que perturbe mis mañanas,
un aroma de jazmín que atormente mis memorias.
Quiero ir a donde van los recuerdos
para embriagarme de ti,
hasta la inconciencia.
Regálame un beso que devore mi locura
y que suavice tu conciencia.
Quiéreme en sentido horizontal:
de Norte a Sur
de Este a Oeste.
Derrama el ocre infinito
sobre mi piel.
Que tu sudor sea la sangre
de mi cuerpo y que la vida
se escuche en un solo corazón.
Regálame tu amor
para mover mil montañas,
para doblegar mil razones,
para atormentar mil mariposas,
para despedazar mil dragones.
Regálame tu amor
para olvidar esta soledad
compañera de mi dolor.
De Ciber