Es hermosa la capacidad que tenemos los seremos humanos de sentir y principalmente cuando logramos percatarnos de lo valioso que es nuestra naturaleza.

No importa si existe el príncipe o princesa azul, cuando queremos registrar, lo hacemos soñando o despiertos; por ejemplo hoy mismo, sentada en mi escritorio, leyendo algunos de los cuentos de esta página, principalmente aquellos eróticos o de amor, voy sintiendo como cambia mi respiración, obviamente comienzo a imaginarme cómo seria si estuviese con aquel que pudiera tocarme entera, hacerme gemir cuando su mano grande pero suave, tocara mi intimidad, aquella que generosamente se abre y se moja para darle la bienvenida a los roces, al órgano, a la sensación.

Cómo poder desnudar mis senos voluptuosos y que pudiesen ser acariciados ritmìcamente, dejarlos ver algo caídos, haciendo sentir al otro como una bestia que quiere tomar su presa.

Y cuando ya mi cuerpo, mi temperatura no la puedo frenar, buscar los labios húmedos del otro y sentir su lengua que recorre la mía, tocarlo entero, buscar con mi mano esa presa dura que va mojándose, haciendo más fácil mis caricias de abajo hacia arriba.

Mejor aún es, cuando hago memoria de aquel personaje que quiero o que he sentido atracción física desde hace tiempo y, que por algún motivo no ha podido ser mi pareja o no hemos tenido oportunidad de algún encuentro. En lo prohibido esta el encanto porque nuestras imaginaciones son más fuertes, uno va armando un escenario perfecto.

Quisiera ponerme abajo, arriba, en cuatro piernas, de lado, agachada, en todos los ángulos para no perder ningún tipo de sensación nueva, extrema, sí, quiero eso y sobre todo cuando me siento presa acá en mi trabajo no pudiendo hacerlo, me sujeta la responsabilidad y las normas, pero mi mente y mis deseos jamás serón truncados, no son esclavos de nadie.

Ahora puedo invocar a todos aquellos hombres que deseo, porque al no tenerlos concretamente no haré daño a nadie, sin embargo, no me privo de pensar en estar con esos machos, quisiera atenderlos sexualmente, ver sus ojos perdidos, respiración agitada, sudorosos, verlos como gigantes arriba mío, que me digan solo RICA, no deseo frases de amor ni de promesas, solo eso....

En otras culturas, el hombre tiene varias mujeres y en otras, solo existe hacer el amor con una sola persona y comprometerse a ser leal no solo de pensamiento también de cuerpo, todo eso depende de dónde vivamos, de nuestras creencias adquiridas, anhelos, nuestros modelos, no obstante, nuestra mente es difícil que sea muy leal a una sola persona, porque en la medida que vamos descubriendo mundo, también vamos conociendo seres que se acercan a nuestro modelo ya sea físico o espiritual, (Artistas, amigos, cantantes, jefes, etc.) pero si ya estamos casados y formamos una familia, quizás nos limitemos solo a eso, a amar o intentar amar hasta la vejez a esa persona elegida.

Pero yo hablo solo de atracción y así puedo ser mujer de varios, eso me gusta, no me da vergüenza, al contrario siento que le doy magia y humedad a mi vida.

Aprovecho de escribir, ahora que nadie me mira en la oficina, descargò mis sensaciones y por la sola voluntad de imaginarme situaciones que hacen entretenida mi estadìa acà. Y por supuesto lo hago ahora que estoy vigente, sana, porque no todo dura y eso todos lo sabemos.