Me preparé para no enamorarme,
y la lección aprendida hasta ahora funcionaba,
pero, al ser tan hermosa y cada día conocerte
se me hace bien difícil mantener ese juramento.
Lo intento, me esfuerzo, te evito,
y día a día busco un pos-grado a esa preparación;
no quiero enamorarme, no debo enamorarme,
no puedo enamorarme, no esperaba enamorarme.
Menos mal no lo sabes, ni lo presientes;
somos amigos, y de los buenos, y te quiero,
te fallo, te miento, me escondo, incluso te ignoro,
y lo hago por que la preparación no fue suficiente.
Que me pase esta locura, este lapsus, esta ilógica,
y sabré recompensar por mis malas actitudes,
al querer no volver a enamorarme. |