La puerta cada vez se cierra por dentro o por fuera en tus ojos y a veces en los míos. Aquella puerta que no tiene entrada ni salida pasaje ni paraje calle ni vereda Es la puerta que blanca con retina y heridas en el poco y en la nada sin adiós sin reposo ...
Texto agregado el 29-05-2010, y leído por 106 visitantes. (1 voto)