Silenciosa, y ruidosa a la vez,
En ti yo encuentro momentos de serenidad,
Pensamientos perdidos,
Y recuerdos olvidados,
Sentimientos y ansiedades, estallidos de lagrimas por los momentos recordados,
Pero después te miro y tú me das la calma,
Cuando te contemplo, me dices tantas cosas sin decir palabra
Y tú me sientes cuando derramo mis lágrimas
Tú me comprendes pero sigues callada, sin decir palabra,
Y con tus sonidos de mareas bravas,
Tú me contestas sin decir palabra
Por eso te quiero tanto, contigo yo me quedara porque tú, siempre me escuchas cuando yo te
Doy mis charlas, con todas esas vivencias, que derramo yo en mis lágrimas,
Por eso te quiero tanto, porque tú me das la calma,
Y cuando calmada estoy yo te vuelvo a contemplar,
Dándome cuenta al momento, de lo mucho que me das
Y aunque palabras no digas y callada siempre estas,
Siempre me escuchas amiga ,la calma ,siempre me das